MEXICO, 21 abr (Xinhua) -- Jefes de Estado y de Gobierno que participaron hoy miércoles en la XXVII Cumbre Iberoamericana, realizada en Andorra, demandaron un acceso igualitario y equitativo a las vacunas contra la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19), y rechazaron el acaparamiento de éstas en la lucha contra el virus.
"Los efectos devastadores de la pandemia requieren una respuesta global, coordinada, solidaria y mancomunada, que enfrente el gran reto de la reconstrucción inclusiva y resiliente de nuestras economías", señalaron en la declaración final del encuentro realizado de manera virtual.
Los 22 Estados miembro urgieron a la comunidad internacional y a la industria farmacéutica a enfrentar la pandemia de forma más equitativa y solidaria, garantizando el derecho a la salud, permitiendo que el acceso, compra y distribución de las vacunas sean universales, evitando el acaparamiento de éstas.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, pidió una distribución equitativa de las vacunas contra la COVID-19 y llamó a las naciones de la región a actuar "unidas por solidaridad" para "garantizar la producción y distribución equitativa de las vacunas".
"Seamos protagonistas unidos, solidarios y organizados de una civilización que se reconstruye para integrar a todos", propuso Fernández durante una intervención virtual en la Cumbre, que se llevó a cabo bajo el lema "Innovación para el desarrollo sostenible-Objetivo 2030. Iberoamérica frente al reto del Coronavirus".
El presidente advirtió que "el mundo se arriesga a una recuperación incompleta, desigual e insostenible", y remarcó que "es indispensable profundizar la transferencia de tecnologías y la cooperación financiera internacional, sin exclusiones".
Por su parte, el mandatario de Chile, Sebastián Piñera, afirmó que la crisis ocasionada por la COVID-19 puso de manifiesto un notable éxito del mundo científico y un grave fracaso del mundo político.
"Basta comparar la velocidad récord con que se generaron las nuevas vacunas. Hace un año no teníamos vacunas, no teníamos medicamentos; hoy tenemos vacunas, aunque no distribuidas con la justicia y la velocidad que se requiere", señaló el mandatario en su intervención virtual.
Señaló que si comparamos "ese enorme" desarrollo de las vacunas con lo que está ocurriendo en la mayoría de los países en materia de distribución y cobertura a los ciudadanos más vulnerables "vemos, también, una profunda carencia y deficiencia", por lo que pidió fortalecer la Organización Mundial de la Salud y acordar un tratado internacional que "nos permita estar mejor preparados para prevenir, enfrentar y superar futuras pandemias".
En tanto, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, expresó que "las vacunas son escasas y por eso la equidad y el acceso igualitario son fundamentales", e instó a los Estados miembros a actuar de forma coordinada para aplicar "políticas urgentes e innovadoras" en el contexto de la pandemia.
"Una de ellas, quizá la más importante, es garantizar que ningún país monopolice el acceso a vacunas", apuntó en su intervención virtual, al remarcar que el mundo demanda solidaridad entre los países, así como de los organismos financieros internacionales para apoyar la recuperación pospandemia.
Moreno agregó que la pandemia ha llenado de dolor al mundo, ha destrozado las economías y ha hecho retroceder en los objetivos de desarrollo sostenible, por lo que la única salida es generar respuestas conjuntas y la movilización de recursos para reactivar las economías y proteger a los más vulnerables.
Mientras tanto, el mandatario de Bolivia, Luis Arce, en su participación virtual propuso la lucha conjunta de las naciones contra la pandemia y la liberación de las patentes de las vacunas por parte de las transnacionales.
"Este encuentro de países iberoamericanos tiene la tarea ineludible de levantar en alto las banderas de la defensa de la vida, la igualdad, la solidaridad y la complementariedad, pero también de un multilateralismo más solidario para superar juntos esta crisis", expresó.
El presidente Arce advirtió que las naciones desarrolladas, como Estados Unidos, tampoco superarán plenamente los efectos económicos de la pandemia si las naciones del sur son dejadas en la más absoluta vulnerabilidad.
Por su parte, la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, criticó la desigualdad en el acceso de las vacunas, comparando el desarrollo de la pandemia en zonas ricas y pobres y la posterior crisis económica, que ha profundizado las condiciones humanas.
Sin embargo, destacó que la naturaleza, en medio del gran confinamiento que tuvo el mundo en el 2020, "tuvo un chance para respirar".
Rodríguez también pidió cooperación para descongelar los recursos venezolanos en el extranjero y reforzar la lucha contra la pandemia del nuevo coronavirus en el país.
En tanto, el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, lamentó el poco acceso a la vacuna contra la COVID-19 "a pesar de haber realizado todas las gestiones a tiempo (...) Las vacunas deben llegar a todos por igual, no es justo lo que hoy en día está sucediendo, se trata de la vida".
Hernández amplió que se confió en el multilateralismo para su consecución, pero "al día de hoy hemos recibido unas muy pocas vacunas, y a cuentagotas, situación que retrasa todos los planes que hemos trazado para la reconstrucción nacional y reactivación económica".
En su participación virtual agregó que "tampoco podemos descartar que, ante el acaparamiento de países que tienen más de las dosis necesarias para su población, en un acto de humanidad puedan donar o vender a los países que ahora las necesitamos".
Por su parte, el rey Felipe VI reforzó el compromiso de España con los países de Iberoamérica durante su participación en la Cumbre, mientras que el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, anunció que España pondrá a disposición de los países de América Latina y el Caribe "entre un 5 y un 10 por ciento" de las vacunas adquiridas por España, una vez que se alcance el 50 por ciento de la vacunación de la población española.
Los líderes de América Latina y el Caribe junto a España, Portugal y Andorra acordaron este día posiciones comunes frente a la crisis provocada por la enfermedad.
La Cumbre Iberoamericana estaba prevista para realizarse en noviembre de 2020, pero se prorrogó debido a la pandemia, siendo esta la primera ocasión en que el encuentro se desarrolla de manera híbrida (presencial y virtual).
