LA HABANA, 10 abr (Xinhua) -- Tras 12 años luchando por un sueño, la tiradora cubana Laina Pérez sabe que el momento de participar en una Olimpiada por vez primera está cada vez más cerca.
La atleta de 32 años entrena junto sus compañeros de equipo a las afueras de La Habana con el propósito de mejorar sus marcas personales de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio, Japón, que tendrán lugar entre el 23 de julio y el 8 de agosto próximos.
Pérez, quien es graduada de sicología de la Universidad de Matanzas y vive a unos 145 kilómetros de la capital en el pueblo de Jaguey Grande, aseguró su clasificación olímpica cuando ganó la primera medalla de oro para Cuba durante los Juegos Panamericanos de Lima, Perú, en 2019.
"Par los atetas que nos estamos preparando para Tokio ha sido complicado aprender a lidiar con esta situación por la incertidumbre y rumores que se generaron al principio sobre la suspensión de los juegos", dijo a Xinhua.
Agregó que, para ella, aunque la pandemia de COVID-19 haya alterado el ritmo de la preparación deportiva, la aspiración de alcanzar buenos resultados en la próxima cita olímpica continúa intacta.
"Son muchos los atletas que se preparan y entrenan toda su vida para asistir y no todos tienen ese privilegio. Claro que me siento ganadora", comentó.
En medio del mayor brote de casos de COVID-19 desde el inicio de la pandemia en la isla en marzo de 2020, los atletas que participarán o aspiran a un cupo para la próxima Olimpiada entrenan en diferentes regiones del país bajo estrictos protocolos de salud a causa de la pandemia.
Entre ellos se encuentra el campeón panamericano de lucha libre Alejandro Valdés, quien viajó desde La Habana a la provincia de Sancti Spiritus, en el centro de Cuba, para incorporarse a la fase final de la preparación olímpica.
"Nosotros no salimos de aquí. Hay que tomar todas las medidas de precaución porque la COVID-19 no tiene cara. Nuestra jornada se reduce a entrenamiento y descanso", aseguró a Xinhua.
A poco más de 100 días para la arrancada de los Juegos Olímpicos de Tokio, las autoridades en la isla estiman que alrededor de unos 80 atletas de la nación caribeña clasifiquen para la venidera justa.
Actualmente, 42 deportistas cubanos han ganado sus boletos para el mayor certamen multideportivo del mundo, entre ellos 14 representantes del atletismo, 12 de la lucha, y 5 del tiro deportivo, de acuerdo con datos oficiales.
Otros deportes y modalidades como el remo, la gimnasia artística, el pentatlón, el taekwondo, el remo y el canotaje también han asegurado su participación en el certamen olímpico con menor cantidad de asistentes.
Entre tanto, los judocas de la isla, a pesar de los contratiempos generados por la detección de casos de COVID-19 entre las máximas figuras de este deporte en Cuba, continúan sumando puntos en certámenes internacionales para conquistar posiciones cimeras en el ranking mundial clasificatorio para las próximas Olimpiadas.
Por su parte, las duplas de voleibol de playa, y el equipo nacional de boxeo "Los Domadores de Cuba", esperan ganar su clasificación en eventos deportivos que tendrán lugar en los próximos meses.
De igual modo, la selección de béisbol, deporte nacional en la isla, tiene previsto discutir su cupo en el certamen preolímpico de las Américas, que se desarrollará desde inicios de junio.
En entrevista con la radio local, el vicepresidente del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación de Cuba (INDER), Ariel Sainz, insistió en que a causa de la emergencia sanitaria ha resultado difícil para los atletas llegar "a los escenarios competitivos y países que tienen sus fronteras cerradas", lo que constituye una preocupación por la poca cantidad de competencias en el exterior".
"Siguen estando las principales opciones en aquellos atletas que han mantenido una estabilidad durante el ciclo olímpico, como son los casos de Mijaín López (130 Kg) e Ismael Borrero (68 Kg) en la Lucha, Andy Cruz y Julio C. La Cruz en Boxeo y Yaimé Pérez y Juan Miguel Echavarría en Atletismo, todos ellos con opciones reales de subir a lo más alto del podio", agregó el funcionario.
La crisis de la COVID-19 ha forzado a los atletas cubanos a entrenar desde gimnasios improvisados en los balcones, techos y terrazas de sus hogares con el objetivo de mantener su forma deportiva.
La nación caribeña reportó este sábado 1.040 nuevos casos de coronavirus y 5 fallecidos, para un total general de 85.572 contagios y 453 decesos.
Recientemente, un grupo de atletas olímpicos de la isla se sumaron como voluntarios a un estudio de intervención que evalúa la eficacia del candidato vacunal cubano Soberana 02 durante la tercera y última fase de ensayos clínicos.
"El mejor regalo de nosotros, los deportistas, al personal de salud, será seguir el entrenamiento con mucha disciplina, llegar a Tokio y, en mi caso, convertirme en doble campeón olímpico de boxeo", respondió el atleta cubano Julio Cesar la Cruz a la prensa local minutos después de recibir la primera dosis de Soberana 02.
Desde su debut en los Juegos Olímpicos de Paris en 1900, Cuba ha acumulado 226 medallas, cifra superior a la alcanzada por cualquier otra nación de América Latina y del Caribe en la historia de estos certámenes.
Su mejor actuación histórica tuvo lugar en 1992 cuando se ubicó quinta en los Juegos Olímpicos de Barcelona, España.
Entrevistado por Xinhua, el comentarista y periodista deportivo de la televisión estatal, Pavel Otero, resaltó que Cuba participará a los Juegos Olímpicos de Tokio con una delegación reducida en comparación con lides anteriores.
"En mi opinión, la isla pudiera ganar alrededor de unas diez medallas con las mayores posibilidades para el boxeo, lucha, atletismo y judo. De oro tal vez sea posible obtener unas 5 preseas, que son las que definen escaños", apuntó.
Cuba, que pudiera convertirse en la primera nación latinoamericana con vacuna propia contra la COVID-19, espera ubicarse "entre los primeros 20 países del medallero" durante la justa olímpica de Tokio, de acuerdo con los pronósticos del INDER.
