ABU DABI, 28 mar (Xinhua) -- El consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, dijo este domingo que las opiniones de algunos países occidentales sobre los derechos humanos no representan a las de la comunidad internacional.
Wang hizo estas declaraciones en una reunión con su homólogo de Emiratos Árabes Unidos, el jeque Abdullah bin Zayed al-Nahyan, en Abu Dabi, la capital del país de Oriente Medio.
El canciller chino dijo que la situación de los derechos humanos de un país debe ser juzgada por su pueblo, y no por otros países.
"El mundo debería escuchar y asimilar las opiniones de los países en desarrollo para que la definición de derechos humanos sea más amplia, diversa y equilibrada", dijo Wang.
Resaltó que los derechos a vivir y desarrollarse son tan importantes como los derechos políticos y sociales, y la equidad y la justicia deben ser respetadas al igual que la democracia y la libertad.
"Es normal que diferentes civilizaciones y tradiciones en diferentes fases de desarrollo conduzcan a diferentes entendimientos y preferencias. Por lo tanto, abogamos por el intercambio equitativo y el aprendizaje mutuo sobre la cuestión de los derechos humanos", añadió Wang.
Reiteró que China se opone a cualquier forma de injerencia en los asuntos internos de otros países con el pretexto de proteger los derechos humanos, y se opone a la difamación de otras naciones mediante el uso de los derechos humanos como herramienta política.
"Ningún país es superior a otro en este mundo, y el estándar de un solo país no debe ser considerado como el estándar internacional", dijo Wang, señalando que sería la mayor injusticia en la historia de la humanidad si algunos países occidentales siguen utilizando los derechos humanos como una excusa para reprimir y contener a los países en desarrollo, privando de su propio desarrollo a los países no occidentales.
China está dispuesta a mantener el diálogo con Emiratos Árabes Unidos sobre la cuestión de los derechos humanos y procurar conjuntamente el avance en la protección de los mismos derechos tanto en ambos países como en el mundo, agregó Wang.
Por su parte, el jeque Abdullah dijo que el nivel de bienestar y felicidad de los ciudadanos debe ser el criterio para juzgar la situación de los derechos humanos en un país.
Obligar a otros a aceptar los propios valores es ejercer la hegemonía, y muchos países en desarrollo han sufrido este tipo de trato injusto en cuanto a los derechos humanos, señaló.
Emiratos Árabes Unidos quiere ampliar la comunicación y la cooperación con China para promover y proteger los derechos humanos, añadió.