Brasil tiene el peor sábado de la pandemia, con 1.555 muertos en un día

Actualizado 2021-03-07 07:57:49 | Spanish. xinhuanet. com

SAO PAULO, 6 mar (Xinhua) -- Brasil registró hoy 1.555 fallecidos por la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19) en las últimas 24 horas, en el peor resultado para un sábado desde que inicio la pandemia, con lo cual acumula 264.235 muertes, informó el Ministerio de Salud.

La cartera de Salud también reportó 69.609 infectados de la COVID-19 en las últimas 24 horas, para un acumulado de 10.938.836 casos positivos desde que se diagnosticó el primer contagio en el país en febrero del año anterior.

De acuerdo con las estadísticas del Ministerio de Salud, el resultado de este sábado ocurre en una semana con altos índices, luego de que Brasil batió el récord de muertos el pasado miércoles con 1910 decesos en un día y en momentos en que el sistema hospitalario se encuentra colapsado en varias regiones del país, donde se aplicaron cuarentenas estrictas y toques de queda para reducir la velocidad de los contagios.

En la actualidad, Brasil registra 126 muertes acumuladas por cada 100.000 habitantes, según el Ministerio de Salud.

Sao Paulo (sureste) es el estado más afectado del país al registrar 61.417 fallecidos y 2.107.687 casos.

El estado de Sao Paulo, el más rico y poblado de Brasil con 46 millones de habitantes, comenzó este sábado una rigurosa cuarentena que se extenderá hasta el 19 de marzo, periodo durante el cual sólo se permitirá la apertura del comercio esencial y se aplicará un toque de queda nocturno, además de que fueron clausurados 43 eventos como fiestas y espectáculos clandestinos durante la madrugada, informó el órgano de contralor Vigilancia Sanitaria en un comunicado.

Comercios y parques estarán cerrados y las playas no permitirán la permanencia de las personas, que sólo podrán hacer actividad física.

Brasil enfrenta una segunda ola en la cual comenzó a predominar la variante de coronavirus P.1, del estado de Amazonas (norte), que los especialistas consideran más contagiosa.

El secretario de Salud del estado d Sao Paulo, Jean Gorinchteyn, anunció el viernes que buscarán médicos y enfermeros voluntarios para ayudar a los profesionales de la línea de frente de esta "guerra" y que se prepara la reapertura de un hospital de campaña en la ciudad de Sao Paulo para evitar el colapso de camas en las Unidades de Terapia Intensiva (UTI).

Los tres estados del sur de Brasil (Paraná, Santa Catarina y Río Grande do Sul) se encuentran con restricciones y toque de queda nocturno luego de que colapsó el sistema sanitario de camas de terapia intensiva.

Este sábado Río Grande do Sul, fronterizo con Uruguay y Argentina, presentaba 600 personas a la espera de una cama UTI y batió su récord de muertes en un día, con 182 decesos.

Hospitales de Río Grande do Sul y de Bahía (noreste) contrataron cámaras frigoríficas móviles debido a la alta demanda de servicios mortuorios por el alza rápido de fallecidos por la COVID-19.

En Río de Janeiro, un juez avaló este sábado la decisión del alcalde Eduardo Paes de cerrar bares, restaurantes y comercios a las 17:00 horas para permitir un toque de queda nocturno hasta las 5:00 de la madrugada del día siguiente con la finalidad de reducir los contagios.

También se cumplió el primer fin de semana de la segunda ola de la COVID-19 en los estados de Ceará, Bahía, Río Grande do Norte y Pernambuco, con toques de queda nocturnos y prohibición de comercio y uso recreativo de playas.

Por su parte, la gobernadora de Río Grande do Norte (noreste), Fátima Bezerra, anunció el viernes el cierre de comercios y la suspensión de actividades a partir de este sábado, al señalar que el estado "vive un precolapso en su sistema (de salud)" por la cantidad de contagios de la COVID-19.

Brasil ha vacunado a más de 10 millones de personas (más de ocho millones con primera dosis) desde el 17 de enero, cuando fueron autorizadas para uso de emergencia las dos inmunizaciones presentes en el país, la CoronaVac, del laboratorio chino Sinovac, y la AstraZeneca-Universidad de Oxford.

 
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Brasil tiene el peor sábado de la pandemia, con 1.555 muertos en un día

Spanish.xinhuanet.com 2021-03-07 07:57:49

SAO PAULO, 6 mar (Xinhua) -- Brasil registró hoy 1.555 fallecidos por la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19) en las últimas 24 horas, en el peor resultado para un sábado desde que inicio la pandemia, con lo cual acumula 264.235 muertes, informó el Ministerio de Salud.

La cartera de Salud también reportó 69.609 infectados de la COVID-19 en las últimas 24 horas, para un acumulado de 10.938.836 casos positivos desde que se diagnosticó el primer contagio en el país en febrero del año anterior.

De acuerdo con las estadísticas del Ministerio de Salud, el resultado de este sábado ocurre en una semana con altos índices, luego de que Brasil batió el récord de muertos el pasado miércoles con 1910 decesos en un día y en momentos en que el sistema hospitalario se encuentra colapsado en varias regiones del país, donde se aplicaron cuarentenas estrictas y toques de queda para reducir la velocidad de los contagios.

En la actualidad, Brasil registra 126 muertes acumuladas por cada 100.000 habitantes, según el Ministerio de Salud.

Sao Paulo (sureste) es el estado más afectado del país al registrar 61.417 fallecidos y 2.107.687 casos.

El estado de Sao Paulo, el más rico y poblado de Brasil con 46 millones de habitantes, comenzó este sábado una rigurosa cuarentena que se extenderá hasta el 19 de marzo, periodo durante el cual sólo se permitirá la apertura del comercio esencial y se aplicará un toque de queda nocturno, además de que fueron clausurados 43 eventos como fiestas y espectáculos clandestinos durante la madrugada, informó el órgano de contralor Vigilancia Sanitaria en un comunicado.

Comercios y parques estarán cerrados y las playas no permitirán la permanencia de las personas, que sólo podrán hacer actividad física.

Brasil enfrenta una segunda ola en la cual comenzó a predominar la variante de coronavirus P.1, del estado de Amazonas (norte), que los especialistas consideran más contagiosa.

El secretario de Salud del estado d Sao Paulo, Jean Gorinchteyn, anunció el viernes que buscarán médicos y enfermeros voluntarios para ayudar a los profesionales de la línea de frente de esta "guerra" y que se prepara la reapertura de un hospital de campaña en la ciudad de Sao Paulo para evitar el colapso de camas en las Unidades de Terapia Intensiva (UTI).

Los tres estados del sur de Brasil (Paraná, Santa Catarina y Río Grande do Sul) se encuentran con restricciones y toque de queda nocturno luego de que colapsó el sistema sanitario de camas de terapia intensiva.

Este sábado Río Grande do Sul, fronterizo con Uruguay y Argentina, presentaba 600 personas a la espera de una cama UTI y batió su récord de muertes en un día, con 182 decesos.

Hospitales de Río Grande do Sul y de Bahía (noreste) contrataron cámaras frigoríficas móviles debido a la alta demanda de servicios mortuorios por el alza rápido de fallecidos por la COVID-19.

En Río de Janeiro, un juez avaló este sábado la decisión del alcalde Eduardo Paes de cerrar bares, restaurantes y comercios a las 17:00 horas para permitir un toque de queda nocturno hasta las 5:00 de la madrugada del día siguiente con la finalidad de reducir los contagios.

También se cumplió el primer fin de semana de la segunda ola de la COVID-19 en los estados de Ceará, Bahía, Río Grande do Norte y Pernambuco, con toques de queda nocturnos y prohibición de comercio y uso recreativo de playas.

Por su parte, la gobernadora de Río Grande do Norte (noreste), Fátima Bezerra, anunció el viernes el cierre de comercios y la suspensión de actividades a partir de este sábado, al señalar que el estado "vive un precolapso en su sistema (de salud)" por la cantidad de contagios de la COVID-19.

Brasil ha vacunado a más de 10 millones de personas (más de ocho millones con primera dosis) desde el 17 de enero, cuando fueron autorizadas para uso de emergencia las dos inmunizaciones presentes en el país, la CoronaVac, del laboratorio chino Sinovac, y la AstraZeneca-Universidad de Oxford.

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