LA HABANA, 28 feb (Xinhua) -- Cuba parece comenzar a controlar el tercer rebrote de la pandemia que vive la isla desde enero, al registrar en los últimos siete días un apreciable descenso en los indicadores que marcan la marcha del nuevo coronavirus.
En la última semana, los decesos tuvieron una ligera disminución al pasar de 30 en igual período anterior a 26, al igual que los contagios que disminuyeron desde 6.234 hasta 5.256.
No obstante, febrero, con 106 fallecidos, se convirtió en el mes más letal desde que la enfermedad apareció en la isla hace casi un año, de acuerdo con cifras del Ministerio de Salud Pública (MINSAP).
La Habana, donde viven unos dos millones de los 11,2 millones de habitantes de Cuba, sigue siendo el epicentro de la pandemia, con una tasa de incidencia de 203,0 por cada 100.000 habitantes, aunque también tienen altos niveles de contagio la occidental provincia de Mayabeque y la oriental Santiago de Cuba.
Esos territorios acumulan más del 70 por ciento de los casos diagnosticados en los últimos 15 días, aseguró el titular del MINSAP, José Ángel Portal, en una reunión del grupo de trabajo estatal de enfrentamiento a la pandemia.
De acuerdo con la web de noticias Portal, esas tres provincias concentran la mayoría de los 25 eventos de transmisión activos en el país, aunque hay enfermos en 90 de los 168 municipios del país.
En la reunión, el presidente Miguel Díaz-Canel, pidió consolidar los resultados del enfrentamiento al nuevo coronavirus y llamo a no confiarse por la disminución de las cifras de contagios.
Por su parte, el primer ministro Manuel Marrero afirmo que "este es el momento de arreciar las medidas en todos los ámbitos, sobre todo en las instituciones, donde es necesario extremarlas".
En La Habana, las autoridades mantienen medidas sanitarias restrictivas, que incluyen la limitación de la circulación desde las 21:00 horas locales hasta las 05:00 horas del siguiente día, así como severas multas a quienes no utilizan las mascarillas.
La tercera ola de la pandemia que vive la isla, iniciada en enero, obligó a volver a aplicar en todo el país medidas como la suspensión del curso escolar, y el cierre de lugares públicos como hoteles, bares y restaurantes.
También desde inicio de este mes se determinó el aislamiento de los viajeros que llegan a la isla, así como la ampliación de la lista de los países con vuelos regulares restringidos.
Esas restricciones a los viajeros comenzaron a dar sus primeros frutos con la disminución de los casos importados, que pasaron de 204 en la semana anterior a 127 en los últimos siete días.
De manera paralela, la industria biotecnológica cubana desarrolla los candidatos vacunales Abdala, Mambisa y Soberana-01 y 02, los que se encuentran en distintas etapas de investigación con la intención final de inmunizar a toda la población.
Esta semana se anunció que Abdala y Soberana-02, los proyectos más avanzados de vacunas, comenzarán en marzo la Fase III de ensayos clínicos, a partir de miles de dosis que ya se producen.
Desde que la enfermedad apareció en Cuba en marzo del pasado año, la isla acumula 322 fallecidos y 49.779 contagiados.
