BEIJING, 20 ene (Xinhua) -- Los legisladores chinos están considerando sanciones específicas para aquellos que roban la identidad de otros para inscribirse en una escuela o universidad.
El proyecto de enmienda a la Ley de Educación de la nación se presentó hoy miércoles a los legisladores para la primera lectura, en la sesión en curso del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional.
A estos impostores se les revocarán sus calificaciones de admisión y se les excluirá de los exámenes nacionales pertinentes durante uno a tres años, según el borrador.
A los infractores que hayan obtenido diplomas académicos se les revocará el título y se los despedirá a aquellos que hayan sido empleados de instituciones públicas, de acuerdo con el documento.
Los hechos de robo de identidad que constituyan un delito serán investigados para determinar la responsabilidad penal, añade.
Quienes permitan a otros utilizar ilegalmente sus identidades para matricularse en una escuela o colegio tendrán prohibido presentar exámenes nacionales de uno a tres años, y las ganancias ilegales obtenidas serán confiscadas, señala el proyecto.
El robo de identidad para admisiones escolares ha sido penalizado en la Enmienda XI de la Ley Penal, que fue aprobada en la anterior sesión legislativa de diciembre de 2020, luego de una serie de escándalos relacionados que sacudieron a la nación.
La Enmienda XI de la Ley Penal estipula que los impostores que roben las identidades de otras personas para inscribirse a una universidad o colegio serán sentenciados a prisión por un máximo de tres años, detención de corto plazo o restricción, y también serán multados.