El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, habla durante una visita técnica a la Central Termoeléctrica "José López Portillo", en Nava, estado de Coahuila, México, el 24 de octubre de 2020. López Obrador dijo el sábado que su política energética no violará acuerdos o contratos, en respuesta a los congresistas de Estados Unidos que señalaron que las acciones de México contradicen el espíritu del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá. (Xinhua/Str)
MEXICO, 24 oct (Xinhua) -- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo este sábado que su política energética no violará acuerdos o contratos, en respuesta a los congresistas de Estados Unidos que señalaron que las acciones de México contradicen el espíritu del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
En una visita a una central termoeléctrica en el norteño estado de Coahuila, López Obrador afirmó que las medidas para dar preferencia a las empresas estatales Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE) serán acorde a los márgenes legales.
"No vamos nosotros a violar ningún acuerdo, ningún contrato. Vamos, de acuerdo a los márgenes legales que se tengan, a darle preferencia tanto a la Comisión Federal de Electricidad como a Pemex, así de claro", apuntó.
López Obrador defendió las acciones para "rescatar" ambas empresas estatales después de que el viernes se divulgó que congresistas estadounidense enviaron una carta a su presidente Donald Trump, en la cual expusieron que México implementaba medidas que podrían afectar a las compañías estadounidenses.
Los congresistas manifestaron que, según reportes, el gobierno mexicano daba un trato regulatorio preferencial a Pemex y retrasaba o cancelaba permisos a empresas estadounidenses, que destinaron inversiones tras la reforma energética de 2014 que abrió el marcado a la participación privada.
El grupo de congresistas, republicanos y demócratas, plantearon que las acciones "violan y contradicen" el espíritu del T-MEC que entró en vigor en julio pasado, en sustitución del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
En respuesta, López Obrador afirmó que en el T-MEC quedó establecido el derecho absoluto y soberano de México para decidir en materia de política energética y, agregó, no daría "ni un paso atrás" para rescatar a las dos empresas estatales.
"Quiero tratar el asunto con mucho respeto hacia ellos (los congresistas), sólo aclarando de que en esta materia y en otras, pero fundamentalmente en lo que tiene que ver con la política energética de nuestro país, no hemos suscrito ningún acuerdo con el gobierno de Estados Unidos o de Canadá", indicó.
El presidente aseguró que los cambios a las leyes en años pasados quitaron fuerza económica y mercado a Pemex y a la CFE porque favorecieron a particulares, por lo que se dijo dispuesto a enviar una iniciativa de reforma al Congreso en caso de que sea necesario para su fortalecimiento.
La mitad de la energía eléctrica que México consume se compra a empresas particulares a precios "elevadísimos", afirmó López Obrador en la termoeléctrica "José López Portillo" de la CFE en el municipio de Nava, cerca de la frontera de Coahuila con Estados Unidos.
"En el caso de que no se pueda con el actual marco legal fortalecer a Pemex y la Comisión Federal de Electricidad, voy a enviar, si es necesario, una iniciativa de reforma a la Constitución", añadió.
