PARÍS, 23 oct (Xinhua) -- Luego de España, Francia se convirtió hoy en el segundo país europeo en superar el sombrío hito del millón de casos, luego de registrar más de 40.000 nuevos casos de COVID-19 por segundo día consecutivo, informaron las autoridades de salud.
En las últimas 24 horas se confirmaron 42.032 nuevos casos, lo que superó el récord del jueves de 41.661. El total de casos aumentó a 1.041.075.
El número de muertes se ubicó en 34.508, luego de los 298 fallecimientos registrados en un solo día, en comparación con los 162 del jueves.
El número de pacientes hospitalizados con COVID-19 subió a 15.008, 976 más en un día, con lo que superó el umbral de los 15.000 por primera vez desde el 25 de mayo. Esto incluye 2.441 casos graves en unidades de cuidados intensivos, los cuales ocupan cerca de la mitad de las 5.100 camas de resucitación del país.
Hasta ahora hay 2.073 focos de contagio en investigación, de los cuales 477 se han registrado en asilos. Esto representa 184 brotes adicionales en 24 horas.
El "grave " resurgimiento de la epidemia ha obligado al Gobierno a extender los toques de queda, impuestos desde el sábado en París y otras ocho grandes ciudades, a otros 38 departamentos.
Las medidas restrictivas ahora incluyen a 46 millones de residentes que tienen que quedarse en casa de las 21:00 a las 06:00 hora local a partir de la medianoche de hoy viernes.
Desde finales de septiembre, cuando repuntaron los casos de contagio, Francia ha implementado medidas adicionales en regiones en alerta máxima, incluyendo el cierre de bares, piscinas y gimnasios. Están prohibidas las instalaciones de entretenimiento como circos, clubs de baile y muestras comerciales. Todos los sitios en exteriores, como estadios, podrán recibir a no más de 1.000 personas.
"Para mediados de la próxima semana tendremos una imagen más clara del efecto de las medidas que hemos tomado. Y tendremos que tomar decisiones en las siguientes semanas para ajustar las cosas" , dijo el presidente Emmanuel Macron durante una visita a un hospital en Pontoise, noroeste de París.
Aún es demasiado pronto para saber si Francia se está dirigiendo hacia un nuevo confinamiento nacional o a cuarentenas locales, añadió.
Con base en los pronósticos científicos, Macron dijo a los reporteros que el pueblo francés tendrá que vivir con la COVID-19 al menos hasta el próximo verano.
"La cuestión es ¿cómo vivir con el virus durante este tiempo? En la etapa en la que nos encontramos, no tenemos otra opción. Es decir, reducir nuestra vida social al máximo, limitar los contactos y romper su circulación" , dijo.
