BEIJING, 28 jun (Xinhua) -- El consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, sostuvo hoy domingo una conversación telefónica con el vice primer ministro y ministro de Relaciones Exteriores de Turkmenistán, Rashid Meredov, y ambas partes pidieron solidaridad y cooperación en los esfuerzos globales contra la COVID-19 y que se deje de politizar la pandemia.
China siempre ha valorado sumamente el desarrollo de las relaciones amistosas con Turkmenistán y ha tratado a Turkmenistán como un buen amigo, un buen hermano y un buen socio, dijo Wang.
Al subrayar que el presidente chino, Xi Jinping, otorga importancia al establecimiento de la confianza y la amistad con su homólogo turcomano, Gurbanguly Berdimuhamedov, Wang dijo que los dos jefes de Estado han mantenido un contacto cercano y han brindado orientación estratégica para el desarrollo de las relaciones bilaterales.
A pesar de la cambiante situación internacional y regional, China no cambiará su política de desarrollar relaciones amistosas con Turkmenistán, dijo Wang.
"Estamos dispuestos a trabajar con la parte turcomana para convertir a nuestra relación en un modelo de trato mutuo sobre bases de igualdad, respeto mutuo y beneficio mutuo", agregó Wang.
En la conversación, Wang también expresó su aprecio por el apoyo de Turkmenistán a China en el combate de la pandemia y elogió las estrictas medidas de prevención y control del país de Asia Central.
La pandemia de COVID-19 demuestra una vez más que el mundo entero es una comunidad de destino y de intereses comunes, y la solidaridad y la cooperación son las armas más poderosas para derrotar a la enfermedad, dijo Wang.
Es una pena, dijo Wang, que algunos países hayan estado politizando la pandemia, calumniando y estigmatizando a China e incluso inventando mentiras para sus propios beneficios.
Sus palabras y hechos erosionan la cuestión fundamental de la moralidad y eventualmente serán rechazados por la comunidad internacional entera, dijo Wang.
Wang señaló que a la parte china le gustaría continuar los intercambios con Turkmenistán en formas flexibles y diversas para impulsar su cooperación y minimizar el impacto de la pandemia en dicha cooperación.
Las dos partes deben firmar lo antes posible documentos de cooperación para alinear la iniciativa de construcción conjunta de la Franja y la Ruta con la estrategia de desarrollo de Turkmenistán para revivir la Ruta de la Seda, y continuar manteniendo y desarrollando una cooperación de largo plazo, estable y estratégica en áreas tradicionales como gas natural, dijo.
Las dos partes también deben aprovechar el potencial, ampliar la cooperación en el área médica y sanitaria y enriquecer constantemente la connotación de sus relaciones, dijo Wang.
China está dispuesta a fortalecer la comunicación y la colaboración con Turkmenistán en asuntos internacionales, apoyarse firmemente entre sí y salvaguardar los intereses comunes de ambas partes como países en vías de desarrollo y mercados emergentes, dijo.
Por su parte, Meredov dijo que Turkmenistán valora altamente el alto nivel de la asociación estratégica entre Turkmenistán y China.
Las dos partes mantienen una estrecha colaboración en los ámbitos político y diplomático, y comparten entre sí su firme apoyo en los asuntos internacionales, dijo.
La parte turcomana aprecia sumamente los enormes esfuerzos y los principales logros alcanzados por el gobierno chino en la lucha contra la epidemia, y agradece a la parte china por cuidar adecuadamente a los ciudadanos turcomanos en China, dijo Meredov.
La parte turcomana cree que las epidemias no deben politizarse bajo ninguna circunstancia, ya que tal intento no es conducente a la cooperación internacional contra la epidemia, indicó.
Meredov afirmó que Turkmenistán siempre se ha comprometido a fortalecer las relaciones amistosas tradicionales con China y que está dispuesto a mantener el contacto al más alto nivel y entre varios departamentos de los dos países de manera flexible, y promover los intercambios y la cooperación en diversas áreas.
La parte turcomana cree que los asuntos de Hong Kong y Xinjiang son exclusivamente asuntos internos de China, y de acuerdo con los propósitos y principios de la Carta de la ONU, ningún país tiene derecho a interferir, agregó.
