Imagen del 29 de mayo de 2020 de la transmisión en vivo del presidente estadounidense, Donald Trump, hablando en una conferencia de prensa en la Casa Blanca, en Washington D.C., Estados Unidos. (Xinhua/Liu Jie)
BEIJING, 3 jun (Xinhua) -- La decisión de Washington de cortar lazos con la Organización Mundial de la Salud (OMS), ampliamente vista como irresponsable e inmoral, ha vuelto a irritar al mundo por la indulgencia de la Administración Trump de buscar chivos expiatorios en otros, particularmente en China y la OMS, por su propia negligencia al gestionar la doble crisis de la pandemia de COVID-19 y el descontento racial en todo el país.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha culpado repetidamente a China por la pérdida de vidas y la recesión económica en el país norteamericano, y acusó a la OMS de estar "centrada en China". Sin embargo, es ampliamente reconocido que no hay pruebas de la presuntas infracciones ni de China ni de la OMS.
Los expertos y funcionarios de salud pública en todo el mundo generalmente se oponen al presidente de Estados Unidos, desacreditando sus decisiones "como una forma de desviar la atención" de los intentos fallidos de su Administración de lidiar con problemas internos y pedir la colaboración global.
Los epidemiólogos han revelado que el 90 por ciento de las vidas perdidas por la pandemia en Estados Unidos podrían haberse salvado si Washington hubiera impuesto restricciones, como el confinamiento y el distanciamiento social, dos semanas antes, el 2 de marzo.
Un trabajador de la salud lleva a un paciente a la sala de emergencias del Centro Hospitalario BronxCare, en el barrio de Bronx de Nueva York, Estados Unidos, el 11 de abril de 2020. (Xinhua/Michael Nagle)
El dolor por la salida de Estados Unidos de la OMS, una decisión "inmoral y probablemente ilegal", se sentirá en "los campos de batalla contra la COVID-19 y en cada comunidad pobre que depende de las agencias de la ONU para recibir alimentos de emergencia, vacunas infantiles, medicamentos esenciales, y orientación", dijo Laurie Garrett, escritora científica ganadora del Premio Pulitzer, en un artículo publicado por Foreign Policy.
Garrett también opinó que la decisión de Washington de abandonar la OMS "resume los aspectos más cuestionables del estilo de liderazgo del presidente: su inclinación a culpar a otros por sus errores, su negativa a compartir cortésmente el escenario global con otros actores, su indulgencia ciega en el interés propio y su absoluto desprecio por la ciencia".
La Sociedad de Enfermedades Infecciosas de América "se opone firmemente a la decisión del presidente Trump", dijo el Dr. Thomas M. File, su presidente, en Twitter. "No tendremos éxito contra esta pandemia o cualquier brote futuro, a menos que nos unamos, compartamos información y coordinemos acciones".
Imagen del 22 de enero de 2020 de la fachada de la sede de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Ginebra, Suiza. (Xinhua/Liu Qu)
Al calificar la decisión de Trump de "vergonzosa e irresponsable", Ami Bera, demócrata de California en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, tuiteó que abandonar la OMS "hará que Estados Unidos y el mundo sean menos seguros".
La ruptura de los lazos de Estados Unidos con la OMS "no es una buena señal", dijo Shekhar Mande, director general del Consejo de Investigación Científica e Industrial en la India.
"La OMS es un organismo valioso que ha desempeñado un papel importante. Ha participado en la eliminación de la viruela, la eliminación del virus de la poliomielitis y ha trabajado muy bien con los países", dijo, según el diario indio Mint.
El ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas, también expresó su oposición a la medida de Washington y la criticó como "la señal equivocada en el momento equivocado", según el medio alemán Funke. "No podemos derribar el dique en medio de una tormenta", dijo Maas, citado por Reuters.
