Por Valentina Bastías Atias
SANTIAGO, 27 may (Xinhua) -- Los entrenadores chilenos han encontrado en las plataformas digitales una oportunidad para promover los beneficios del deporte durante la cuarentena por la pandemia, la que ha obligado a cerrar centros deportivos, gimnasios y colegios para evitar los contagios del COVID-19.
Este es el caso de Benjamín Loubies, un experimentado instructor de artes marciales en escuelas de Santiago, quien debió innovar en sus métodos de enseñanza, adaptándose a la modalidad streaming para continuar con los talleres de taekwondo que impartía a niños y niñas previo a la crisis sanitaria.
En esa línea, Loubies destacó a Xinhua la posibilidad que ofrecen aplicaciones móviles para videollamadas como Zoom, que le ha permitido llevar el taekwondo a decenas de hogares, con el objetivo de incorporar el deporte a las rutinas familiares, especialmente durante el encierro.
"Ahora la prioridad para los niños ha sido estudiar asignaturas base como lenguaje y matemáticas, por lo que la actividad física se ha visto mermada dentro del horario", declaró el también profesor de educación física, quien explicó que "el buen estado físico nos mantiene funcionales", y contribuye a prevenir lesiones asociadas a la falta de movimiento.
El taller en línea que Loubies ofrece dos a tres veces por semana junto al instructor Daniel Ramírez, consta de una veintena de pupilos que van de los seis años en adelante, a quienes separa por edad en dos bloques para mantener la atención del grupo, lo que además permite "dar una clase más personalizada".
"También ha pasado que se agregan las familias y más personas a la práctica. Las familias interactúan más, los adultos se interesan o también los hermanos de los mismos niños que son alumnos", afirmó.
Por la emergencia, el docente debió amoldar la dinámica de la clase, enfocada ahora "en el vocabulario o los pumses", series de movimientos armónicos de combate, que rescatan la esencia y arte de esta disciplina coreana.
La cuarentena total en Santiago y parcial en regiones de Chile, que mantiene a más de siete millones de personas aisladas hace casi dos semanas, ha vuelto imposible concurrir a recintos deportivos o hacer actividad física al aire libre.
Desde el Club de Boxeo Contender han visto en este escenario excepcional una oportunidad para ganar adeptos, después de congelar las clases presenciales en sus dos sucursales de la capital. De tal manera, pueden sobrellevar el impacto económico de la pandemia, que ha traído amplias pérdidas al comercio y afectado al empleo.
Roberto Orosco, profesor del recinto, señaló a Xinhua que el equipo y sus clientes debieron adecuarse a la contingencia con entrenamientos en vivo que promocionan a través de sus redes sociales y su página web.
"Tuvimos que cerrar, que comenzar inmediatamente a reinventarnos y comenzar con clases en línea, porque era nuestra única opción para poder sobrellevar esto, ya que son momentos duros como locatarios, como pymes", lamentó.
En este contexto, el preparador físico valoró la incorporación de personas de diversas ciudades, que piensa "llegaron para quedarse". "Se ha abierto un espacio y posibilidad a otros que no tenían acceso en su región a este tipo de actividades. (La pandemia) tiene en cierta forma un lado positivo para la gente que está limitada por la distancia".
Diversos expertos recomiendan el trabajo físico dirigido durante el confinamiento, lo que implica posiblemente acomodar los espacios y dar un nuevo uso a los artículos del hogar. Esto, considerando los beneficios que reporta el ejercicio a la salud y al estado de ánimo, rescatan.
El doctor Alexies Dagnino, investigador del Laboratorio de Neurobiología del Estrés y del Centro de Neurobiología y Fisiología Integrativa (CENFI), de la Universidad de Valparaíso, destacó que la actividad contribuye al buen humor, y "permite que el cerebro se oxigene mejor, lo cual tiene un impacto positivo en la fisiología cerebral. Cuando nos reímos se liberan endorfinas, estas moléculas mejoran la actividad del sistema inmunológico".
"Contrariamente, el cortisol, conocido como la hormona del estrés, es el principal inmunosupresor endógeno que tenemos", concluyó, respecto de los cuidados físicos y de salud mental que han recomendado los especialistas.
