BUENOS AIRES, 6 mar (Xinhua) -- La académica argentina Juliana González Jáuregui destacó hoy la respuesta de China ante el brote del nuevo coronavirus (COVID-19), al mismo tiempo que cuestionó la hostilidad de Estados Unidos contra Beijing en torno a la situación.
"Los esfuerzos de China para evitar la propagación del coronavirus han sido impresionantes, por la velocidad en que los organismos de salud pública han respondido y por el avance biotecnológico efectuado a una velocidad inusitada", dijo la experta argentina.
La también magíster en Relaciones Internacionales por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales de la Universidad de San Andrés remarcó que China "rápidamente inició estudios para determinar la gravedad y la capacidad de transmisión del virus, y se dio público conocimiento internacional, de manera de aunar esfuerzos con otros países en la creación de herramientas de diagnóstico".
La experta cuestionó, en entrevista con Xinhua, la hostilidad contra China de parte de Estados Unidos, luego de que, el pasado lunes, en el programa The Five, el presentador de Fox News, Jesse Watters, pidiera a China que se disculpara por el brote del nuevo coronavirus.
Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, respondió el jueves a Watters: "La solicitud de que China se disculpe por el brote es infundada, ya que el origen del virus sigue siendo desconocido".
Por su parte, la analista argentina cree que detrás de la hostilidad de Estados Unidos hacia China, expuesta de forma continua y en escalada creciente desde el comienzo de la guerra comercial, yace la preocupación de Washington por lo que son hoy las bases, o los ejes, fundamentales sobre los que se sustenta el modelo de desarrollo chino.
González Jáuregui afirmó que "ese nuevo modelo, que ha recibido especial énfasis una vez iniciado el gobierno del presidente Xi Jinping incorpora elementos que van más allá del desempeño económico: mejoras en los sistemas de salud, educativo, de acceso a la vivienda, al igual que ponen especial acento en el cuidado del medio ambiente, la eficiencia energética y la erradicación de la pobreza".
"Esa hostilidad que se ha plasmado en el plano económico, persigue otros intereses: un intento por detener el avance chino en ciencia y tecnología, en el marco de su Plan 'Made in China 2025'", dijo la Directora de la Cátedra de Estudios sobre China y encargada de un seminario sobre China en la Maestría en Relaciones Internacionales de la Flacso.
La entrevistada consideró que "Estados Unidos no está preocupado, únicamente, por los logros de China en materia económica y sus objetivos de cara al futuro, sino por sus metas de desarrollo en su conjunto. En el marco del objetivo que persigue China de convertirse en una sociedad 'plenamente desarrollada' para 2049, se integran una multiplicidad de dimensiones: económica y financiera, pero también social, educativa, científica y medioambiental, por mencionar algunas de las más relevantes".
La experta concluyó que la hostilidad que despierta el brote del coronavirus es, entonces, una 'excusa' más, como bien lo ha sido la pugna comercial, para cuestionar a China en sus distintas formas de planificar la economía, pero también en sus costumbres ancestrales y en sus maneras de interacción social.
