Por Edna Alcántara y Wu Hao
MÉXICO, 16 ene (Xinhua) -- China tiene mucho que mostrar al resto del mundo teniendo en cuenta las importantes transformaciones que ha logrado en 70 años, dijo a Xinhua el diplomático y economista mexicano Jorge Eduardo Navarrete.
"Probablemente ningún otro país en un periodo histórico tan breve como este, poco más de medio siglo, se ha transformado a sí mismo y ha cambiado su posición en el mundo en forma tan rotunda como lo ha hecho el pueblo chino", resaltó Navarrete.
Embajador de México en China de 1989 a 1993, el diplomático y también académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) planteó que, desde hace siete décadas, el país asiático no ha cesado en su empeño por lograr el desarrollo nacional.
"Lo más importante fue la decisión de la inmensa población china de liberar su propia iniciativa individual y social para aplicarla al desarrollo productivo, al desarrollo técnico y al mejoramiento de las condiciones materiales de vida de la población", consideró.
El embajador eminente recordó que durante su misión diplomática en China atestiguó el proceso y agregó que la política de reforma y apertura "se consolidó y se convirtió en la principal característica de la orientación, de la evolución nacional e internacional de China".
"La experiencia de estar en China en un momento de transformación me da una perspectiva que a mí me parece sumamente interesante para reflexionar: lo que significa no solo para el pueblo chino, sino también para el resto del planeta", enfatizó.
Para Navarrete, quien es vocal de la Junta de Gobierno del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), "es claro que China es uno de los pocos países en el mundo que puede darse el lujo de mirar a largo plazo a 30, 70 o más años en el futuro. La mayor parte de los países en el mundo enfrentan coyunturas para los cuales el largo plazo son 5 o 10 años en el mejor de los casos".
El país asiático, destacó, tiene un rol internacional que no solo es económico o comercial, sino que es también una influencia para otros países en cuanto a alcanzar desarrollo y preservar la paz.
China ha establecido relaciones importantes para el desarrollo de países en África, en América Latina, el sudeste y centro de Asia, y la iniciativa de la Franja y la Ruta, propuesta por el país asiático en 2013, es una "promisoria" en este sentido, afirmó.
"Esta iniciativa no puede verse como una iniciativa para el desarrollo de China, sino como una iniciativa conjunta para el desarrollo de China y de un número creciente de participantes, tanto países en desarrollo como ya desarrollados", expuso.
La iniciativa tiene el propósito de construir una red de comercio e infraestructuras que conecte Asia con Europa y África y más allá de las antiguas vías de la Ruta de la Seda, y hasta el momento, 19 países de América Latina y el Caribe han firmado memorandos de entendimiento con China para sumarse a ella.
El diplomático mexicano señaló, por otro lado, que existen experiencias de China que con el paso de los años han sido retomadas por otros países, como las llamadas zonas económicas especiales.
"Es una experiencia que se ha tratado de reproducir con sus propias características en Asia, en América Latina (...) pero ciertamente es un poco con esa inspiración de esa experiencia", indicó.
Navarrete reconoció además el papel del país asiático en la defensa del multilateralismo para contribuir a la paz y la prosperidad mundial.
