BUENOS AIRES, 20 dic (Xinhua) -- El presidente de Argentina, Alberto Fernández, encabezó este viernes en la Casa de Gobierno la primera reunión del Consejo Federal Argentina contra el Hambre.
La iniciativa incluye a referentes empresariales, sindicales, de organizaciones sociales, de universidades y de la sociedad civil, y busca establecer una política de Estado que garantice el derecho a la alimentación de la población vulnerable.
"Este plan no es el plan del gobierno ni de Alberto Fernández, es el plan de la Argentina. Una vez olvidémonos de nosotros, de quiénes somos, de cómo pensamos y qué representamos. Y admitamos lo indigno que es ser parte de una sociedad que no se preocupa por la gente que pasa hambre", dijo el jefe de Estado.
Fernández enfatizó que "ocuparse de los más postergados es empezar a ocuparnos de todos".
Del encuentro participaron ministros del gabinete, empresarios, sindicalistas, dirigentes de derechos humanos y figuras reconocidas del ámbito de los espectáculos.
Fuentes oficiales explicaron a Xinhua que "Argentina Contra el Hambre es una política de Estado para garantizar el derecho a la alimentación de la población vulnerable".
"Un país dividido entre los que comen y los que no comen es un país fracturado. Argentina Contra el Hambre es un primer paso para que todos vivamos en una Argentina unida. Queremos construir un destino común. Un país unido en el que comprendamos que lo que le pasa al otro nos afecta a todos", añadieron los voceros del Gobierno.
La iniciativa aborda el problema del hambre de manera integral y busca garantizar la alimentación a través de la Tarjeta Alimentar, de recarga mensual, habilitada exclusivamente para la compra de alimentos.
La Tarjeta Alimentar no permite la extracción de dinero ni compras de otro tipo de productos, como bebidas alcohólicas.
Sus beneficiarios directos son quienes cobran una asignación universal por hijo (AUH), una asignación por embarazo o una por discapacidad.
Los montos para los beneficiarios van de 4.000 a 6.000 pesos (63 a 95 dólares).
Por otra parte, se crea la figura del Promotor de Seguridad Alimentaria y Nutricional, a cargo de los gobiernos provinciales, quienes serán los encargados de realizar el asesoramiento nutricional pertinente a los titulares de este derecho, y el seguimiento de la ejecución del programa.
A su vez, se pondrán en marcha talleres de orientación para promover los alimentos sanos y frescos.
"Nuestro compromiso electoral fue cambiar las prioridades y empezar por los que más nos necesitan para poder llegar a todos", dijeron los voceros gubernamentales.
La administración de Fernández asumió el 10 de diciembre pasado, en un contexto económico desafiante. La economía de Argentina, la tercera de América Latina, cerrará este año con una contracción de 3,1 por ciento, según el Fondo Monetario Internacional.
El país registra además alta inflación, que acumuló un 48,3 por ciento entre enero y noviembre, una tasa de desempleo de 9,7 por ciento y un índice de pobreza que afecta al 35,4 por ciento de la población.
