QUITO, 12 oct (Xinhua) -- El Ejército de Ecuador reportó hoy sábado la incursión de hombres encapuchados en las instalaciones de la Contraloría General del Estado en Quito, en el décimo día de protestas contra las medidas económicas adoptadas por el gobierno.
La institución informó en Twitter que soldados del Ejército y efectivos de la Policía "realizaron (una) operación para recuperar el edificio de la Contraloría General del Estado, que estaba tomado por manifestantes desde donde agredían con explosivos al personal de la fuerza pública".
El Ejército publicó fotografías donde se muestran mochilas con material utilizado por los manifestantes.
Por su parte, la ministra de Gobierno, María Paula Romo, informó en su cuenta de Twitter que la Policía detuvo a 30 personas que se apostaron en la terraza de la Contraloría.
"Se revisa el resto del edificio", escribió Romo en la red social tras señalar que una cámara de seguridad de la dependencia grabó la destrucción que sufrió uno de los pisos de la dependencia.
Agregó que la Policía va a desalojar la zona alrededor de la Contraloría para que los equipos de rescate puedan atender el incendio y el personal que está dentro.
Las autoridades no han dado todavía detalles de la incursión, que, según reportes de la prensa ecuatoriana, inició a las 11:00 hora local.
La incursión se produjo aprovechando las protestas que el movimiento indígena realiza desde hace 10 días en Quito, en el marco de un paro nacional indefinido en rechazo a la eliminación de subsidios a los combustibles decretado por el gobierno el pasado 1 de octubre.
La prensa reportó que los hombres encapuchados subieron las barandas de protección que rodean a la Contraloría General del Estado, una de las sedes del Estado bajo protección en el contexto de un toque de queda dispuesto por el Ejecutivo.
Tras la acción, guardias de seguridad sacaron a por lo menos 30 personas; sin embargo, poco después otro grupo de personas ingresó y trató de incendiar las oficinas y destruir el mobiliario con palos, reportó la prensa local.
El movimiento indígena ecuatoriano, que encabeza la protesta, mantuvo este sábado cerradas las vías en varios puntos y obligó a cerrar negocios.
Todo ello en medio de un estado de excepción que rige en todo el país para evitar el caos y precautelar la seguridad ciudadana ante la ola de protestas, las cuales han derivado en actos de violencia, vandalismo, saqueos y bloqueos de carreteras.
El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, hizo un llamado el viernes a un "diálogo directo", al cual accedió este sábado la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, convocante de las movilizaciones.
