DUSHAMBÉ, 14 jun (Xinhua) -- En el contexto de los cambiantes desafíos de seguridad en el mundo, los países de Asia deben unirse para hacer realidad su visión de un modelo de gobernanza de seguridad con rasgos asiáticos.
La quinta cumbre de la Conferencia sobre Interacción y Medidas de Construcción de la Confianza en Asia (CICA) se inaugurará el viernes en la capital tayika de Dushambé, reuniendo a los líderes de los países miembros con el objetivo de encontrar mecanismos efectivos para abordar la seguridad y otros desafíos a los que se enfrenta Asia en general.
Asia es el continente más grande y más poblado del mundo. Alberga 48 países y comprende el 30 por ciento de la superficie terrestre del mundo con el 60 por ciento de la población mundial. La tarea de mantener la seguridad en esta parte del mundo es, por lo tanto, inmensamente difícil.
Hoy en día, algunas partes del continente aún están plagadas de disturbios y conflictos causados por amenazas de seguridad tradicionales y no tradicionales.
Al mismo tiempo, la reaparición de la mentalidad de la Guerra Fría y el acoso hegemónico representan una seria amenaza para la estabilidad y la seguridad del mundo, incluida Asia.
Es imperativo inventar e implementar un sistema de seguridad que pueda salvaguardar los intereses vitales de todos los asiáticos.
Por un lado, todos los países asiáticos valoran el respeto mutuo, el consenso y la acomodación de los niveles de bienestar de cada uno, lo que significa que es posible explorar un nuevo enfoque de la cooperación de seguridad regional, uno que refleje las necesidades asiáticas, se adapte a Asia y sirva a la comunidad y a los intereses de todos.
Asia es el hogar de diversos grupos éticos, religiones y culturas, y diversos sistemas sociales, caminos de desarrollo y niveles de desarrollo económico. Los miembros de la CICA deben generar consenso en la región para desarrollar un nuevo tipo de asociación que ofrezca una mayor cooperación en materia de seguridad y fomento de la confianza. En última instancia, la esperanza es construir una comunidad con un futuro compartido en Asia.
Mientras tanto, el entendimiento mutuo, la adaptación mutua y la solución pacífica de controversias a través del diálogo y las consultas son enfoques prácticos hacia tales objetivos.
El presidente chino, Xi Jinping, en su artículo firmado publicado el miércoles antes de su visita de Estado a Tayikistán, calificó a la CICA como "una plataforma regional importante", diciendo que la organización, en sus 27 años de historia, "ha respondido al llamado de los tiempos y buscado mejorar la confianza y la colaboración entre los países y defender la seguridad y la estabilidad regionales, haciendo contribuciones positivas a la paz y al desarrollo en Asia".
Desde la cumbre de 2014 de la CICA celebrada en Shanghai, los miembros de la conferencia no solo han ampliado su cooperación, sino que también han intensificado su interacción con instituciones multilaterales como las Naciones Unidas y la Organización de Cooperación de Shanghai.
Basándose en sus logros pasados y enfrentando nuevas situaciones, los países asiáticos y sus socios en todo el mundo deben preservar conjuntamente el multilateralismo y el sistema de libre comercio mundial, oponerse al unilateralismo y la intimidación, y comprometerse a mejorar y actualizar el sistema de gobernanza global.
Al hablar con los ministros de Relaciones Exteriores de la CICA en Beijing en 2016, Xi dijo que "una Asia estable y en desarrollo es una bendición, mientras que una Asia turbulenta y en declive no traerá más que problemas al mundo".
Y es una responsabilidad compartida por todos los países asiáticos garantizar que su continente sea una bendición para el mundo.
