BEIJING, 1 jun (Xinhua) -- Xi Jinping, como el máximo líder chino, está increíblemente ocupado, pero aún así encuentra tiempo para interactuar con los niños.
Quizá Xi es uno de los líderes mundiales que interactúa más con los niños: visita escuelas y sus hogares, los observa practicar deportes y caligrafía, y se une a ellos en actividades como la plantación de árboles. Además, escribe con frecuencia a los niños.
Hoy sábado, con motivo del Día Internacional del Niño, los muchachos de todo el país recibieron otra vez el saludo del presidente Xi.
En una carta de respuesta fechada el 31 de mayo a los estudiantes de primaria de Macao, Xi expresó su esperanza de que los estudiantes pudieran transmitir la buena tradición de amar a la patria y amar a Macao y hacer contribuciones al desarrollo del último y a la revitalización de la nación china cuando crezcan.
En la biblioteca de la Escuela Primera afiliada a la secundaria Hou Kong en Macao, los estudiantes aplaudieron después de escuchar la carta del mandatario chino.
"Estoy muy emocionado de recibir la respuesta", apuntó Dang Wing Zi de quinto grado, quien también fue uno de los estudiantes que escribieron la carta inicial. "Voy a estudiar mucho para poder servir mejor al país", manifestó.
Chan Lai Wing, maestra de la escuela, creía que la convicción de servir al país había echado raíces entre los niños y que luego florecería y daría frutos.
China tiene una gran población infantil, con más de 248 millones de personas de 15 años o menos solo en la parte continental del país.
El mandatario chino a menudo muestra su preocupación por su crecimiento y ha expresado su esperanza de que sigan esforzándose para realizar los sueños de la nación.
El 1 de junio de 2015, cuando hablaba con miembros de los Jóvenes Pioneros de China en Beijing, Xi pidió a todos los niños chinos que aprendan a ser buenas personas desde una edad temprana.
"Ser una buena persona significa que uno tiene que tener integridad, conocimientos y responsabilidad", señaló Xi, y destacó que "primero y ante todo, uno debe tener integridad".
En 2016, Xi escribió una respuesta a 12 estudiantes de primaria en Taizhou, de la provincia de Zhejiang. Eran nietos de las personas que cultivaron las deshabitadas islas Dachen en los años cincuenta.
El presidente expresó su esperanza de que los estudiantes aprendan de sus abuelos, al igual que amen al Partido, al país y al pueblo, y se preparen para contribuir a la realización del sueño chino de la revitalización nacional.
Cuando visitaba una escuela primaria en el distrito de Haidian de Beijing en 2014, Xi habló de la necesidad de guiar a los niños para establecer metas altas y crear condiciones para que crezcan mejor.
En mayo de 2013, mientras inspeccionaba una escuela devastada por un terremoto en la provincia de Sichuan, Xi les dijo a los estudiantes que convirtieran su trauma en una fuente de fortaleza, instándolos a ser fuertes, valientes y unidos.
La escuela se ha recuperado completamente y ha establecido como prioridad el desarrollo de la educación científica. Para ello se abrieron nuevas instalaciones de investigación.
Tang Qian, una ex alumna de la escuela, indicó que se esforzaría por convertirse en científica, explorando los misterios del mundo.
"Hay un gran interés entre los estudiantes por estudiar ciencias", subrayó.
En 2018, al responder a una carta remitida por una escuela primaria en la provincia de Shaanxi, Xi expresó la esperanza de que los estudiantes aprendan más sobre la historia de la revolución, sigan el ejemplo de los héroes y los modelos, amen al Partido, al país y al pueblo y transmitan las buenas tradiciones revolucionarias.
"Aspiramos a ser personas con fe y responsabilidad y creceremos para construir nuestra patria bien", manifestó Wang Tianjiao, estudiante de cuarto grado en la escuela.
