BUENOS AIRES, 10 abr (Xinhua) -- El analista argentino Rosendo Fraga afirmó hoy que "estabilidad y crecimiento" son las asignaturas pendientes de Argentina en materia económica, mientras que dejar atrás una lógica de "enemigos" antes que de "adversarios" es la tarea pendiente en lo político.
En una entrevista con Xinhua, el experto, director del Centro de Estudios Unión para la Nueva Mayoría, se refirió al año electoral de Argentina, tercera economía de América Latina, que en octubre definirá en elecciones generales al presidente para el período 2019-2023.
El actual jefe de Estado, Mauricio Macri, ya ha confirmado que aspira a presentarse para un nuevo mandato, el segundo y último al que lo habilita la Constitución Nacional, mientras que el diputado Daniel Scioli, a quien Macri derrotó en los comicios de 2015, también adelantó que aspira a presentarse como candidato.
En ese marco, también anticiparon su intención de competir como candidatos a presidentes Sergio Massa, ex jefe de Gabinete y ex diputado nacional, por el espacio Alternativa Federal, y el economista Roberto Lavagna, ex titular del Palacio de Hacienda entre 2002 y 2005, mientras que resta confirmarse si la ex presidenta Cristina Fernández (2007-2015), actual senadora nacional, se postulará como candidata.
"Si hay una segunda vuelta electoral en noviembre, y la misma es entre Macri y Cristina Fernández, estarán en juego dos modelos totalmente distintos. El primero hoy coincide en su visión del mundo con Brasil y la segunda con Venezuela. Si terciara un tercer candidato, como Lavagna, podrían pensarse alternativas intermedias. Pero eso por ahora, es incierto", advirtió el experto, integrante de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas.
El próximo jefe de Estado de Argentina iniciará su mandato el 10 de diciembre y, para Fraga, quien asuma el cargo dentro de seis meses "enfrentará una situación económica muy difícil. Alta inflación, recesión, deuda externa. A ello se suma una situación social muy difícil en materia de pobreza, desempleo y desigualdad", consideró el analista.
Argentina cerró el 2018 con una contracción económica de 2,5 por ciento, una inflación acumulada de 47,6 por ciento, una tasa de desocupación de 9,1 por ciento y un índice de pobreza de 32 por ciento, según los últimos datos oficiales.
El miércoles, el Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo en su informe "Perspectivas de la Economía Mundial (PEM)" que la economía de Argentina se contraerá en el primer semestre de 2019 a medida que la demanda interna se desacelera con políticas más estrictas para reducir los desequilibrios.
Sin embargo, el Producto Interno Bruto (PIB) argentino volverá a crecer en el segundo semestre del año, cuando se recupere el ingreso disponible real junto a la producción agrícola después de la sequía del año pasado, agregó.
Aun así, la economía de Argentina caerá 1,2 por ciento en 2019, pero crecerá un 2,2 por ciento en 2020, de acuerdo con las proyecciones del FMI.
Al hacer un resumen de la gestión de Macri, Fraga dijo que la actual administración "no ha tenido éxito en materia económica. En política exterior ha tenido logros, mientras que en política interna ha mantenido la fractura política entre macrismo y el kirchnerismo", espacio que gobernó Argentina entre 2003 y 2015.
En la visión del experto argentino, las tareas pendientes en el país austral se pueden dividir según se traten de economía o de política.
"En lo económico, estabilidad y crecimiento son las asignaturas pendientes", observó, luego de una volatilidad de la economía que provocó una inflación de 6,8 por ciento en los primeros dos meses del corriente año y que ha generado que el dólar alcance una paridad de 44,85 pesos por unidad, una de las más altas de la historia en Argentina.
En lo político, dijo Fraga, la asignatura pendiente es "cerrar la 'grieta' que transformó la política de adversarios en una de enemigos", con una fuerte división entre la ciudadanía argentina, según la mayor o menor cercanía con el actual gobierno, de Cambiemos, o con la ex presidenta Cristina Fernández.
