Imagen del 18 de marzo de 2019 del presidente del internado italiano Vittorio Emanuele II, Paolo M. Reale (d-atrás), y los estudiantes que escribieron una carta al presidente chino, Xi Jinping, posando, en Roma, Italia. Con sorpresa, emoción y ánimo recibieron los estudiantes de un internado italiano la respuesta del presidente chino, Xi Jinping, a la carta que le habían escrito en chino. En su respuesta el domingo, Xi animó a los estudiantes a ser embajadores culturales entre las dos naciones y les dijo que estaba encantado de comprobar la fluidez con que se expresaban en chino. (Xinhua/Cheng Tingting)
ROMA, 21 mar (Xinhua) -- Con sorpresa, emoción y ánimo recibieron los estudiantes de un internado italiano la respuesta del presidente chino, Xi Jinping, a la carta que le habían escrito en chino.
"Estoy muy contento de que el presidente Xi recibiese nuestra carta", explicó a Xinhua Giovanni Stoppoloni, alumno de quinto grado en el Convitto Nazionale Vittorio Emanuele II de Roma.
Stoppoloni es uno de los ocho estudiantes que, junto con el presidente del colegio, Paolo M. Reale, escribieron una carta a Xi antes de su visita de Estado a Italia para trasladarle sus expectativas por el viaje y su disposición a fomentar la amistad entre los dos países.
En su respuesta este domingo, Xi animó a los estudiantes a ser embajadores culturales entre las dos naciones y les dijo que estaba encantado de comprobar la fluidez con que se expresaban en chino.
"Nuestros estudiantes han trabajado duro para aprender chino a lo largo de los años", dijo Reale, para quien la respuesta de Xi fue "la mejor recompensa y reconocimiento".
Inaugurado en 2009, el Convitto Nazionale Vittorio Emanuele II de Roma es una escuela secundaria internacional que imparte las asignaturas de ciencias en chino. Tiene la más grande Aula Confucio de Italia, y aprender lengua y cultura chinas es muy popular entre los estudiantes.
Según Stoppoloni, aprender mandarín le ha ayudado a ensanchar horizontes y comprender la historia y la cultura del país asiático. En el proceso, detalló, ha aprendido también a cooperar y compartir, así como a ser más consciente de la responsabilidad ante el futuro que tienen los jóvenes.
Otra estudiante, Ludovica Olivari, dijo que le había impresionado cuando Xi les dijo en su carta que "los jóvenes siempre están llenos de sueños" para luego desearles que los suyos se cumpliesen.
"Somos jóvenes y debemos tener objetivos y sueños", afirmó Olivari. "Seguiremos estudiando mucho en busca de nuestros sueños".
El sueño de Mario Lomonaco es hacer una carrera relacionada con China. Aprender chino, aseguró, le ha dado muchas oportunidades y abierto la puerta a un mundo nuevo.
Nicolas Kovacich, entre tanto, explicó a Xinhua que irá a China el próximo año a estudiar Economía y que está emocionado ante su vida universitaria en el país asiático.
"En el futuro, deseo trabajar en China", apuntó.
