BUENOS AIRES, 2 dic (Xinhua) -- Analistas y académicos argentinos destacaron hoy los consensos alcanzados en la reunión que sostuvieron el sábado el presidente de China, Xi Jinping, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, y lo calificaron de "un avance muy importante" no solo para China y Estados Unidos, sino para todo el mundo.
El economista argentino Guillermo Santa Cruz destacó como una "muy buena noticia" los importantes acuerdos logrados en la reunión entre los dos líderes mundiales en Buenos Aires, en el que ambos presidentes decidieron no imponer nuevos aranceles y plantearon una serie de propuestas constructivas para resolver adecuadamente las diferencias y problemas existentes.
Santa Cruz, integrante del Grupo de Trabajo sobre China del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI), dijo a Xinhua que "es una buena noticia, porque significa que tanto China como Estados Unidos reconocen que tienen más para ganar trabajando juntos que separados, de otra manera ni siquiera se sentarían a negociar".
"Hay que evaluar este acuerdo en su justa medida. Recordemos que en abril del año pasado, ambos mandatarios también habían llegado a un acuerdo para resolver las negociaciones en un lapso de 100 días, y terminamos con un nivel de tensión incluso más alto que cuando Trump asumió", sostuvo el experto.
Santa Cruz, coordinador del Observatorio de Inversiones Chinas de la Cámara de la Producción, Industria y Comercio Argentino-China, enfatizó que "no debemos pensar que se terminó la fricción comercial, sino que las partes simplemente se tomarán 90 días para continuar negociando".
"El éxito tendremos que medirlo en base a los acuerdos específicos que se logren en ese tiempo", consideró el analista.
El analista destacó los beneficios del consenso logrado y su impacto en la economía mundial, e indicó que "el efecto más inmediato sería sobre el comercio entre China y Estados Unidos, ya que por un lado se suspende la subida de aranceles de importación en Estados Unidos prevista para enero de 2019, y por otro, China se comprometió a incrementar sus compras".
"Estos dos países son el motor de la economía mundial, por lo tanto el mundo necesita que entre ellos exista una relación beneficiosa y estable, para que puedan seguir creciendo y demandando productos y servicios de todo el mundo", remarcó el economista.
Para el experto Eduardo Oviedo, miembro del Consejo de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina, "la mayoría de los países quieren comerciar con China y con Estados Unidos, y esta guerra comercial los afecta en la necesidad de tener que optar por uno o por otro. El acuerdo del sábado es un avance muy importante, no sólo para las relaciones entre China y Estados Unidos, sino para las relaciones de China y de Estados Unidos con el resto de los países", consideró.
"El acuerdo ha sido de mucha importancia y va a tener una gran importancia para la economía mundial, precisamente para países como Argentina, que no quieren estar buscando una suerte de equilibrio sutil entre Estados Unidos y China", dijo el entrevistado, master en Derecho por la Universidad de Beijing.
El analista, doctor en Ciencias Políticas y profesor de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), dijo que "si entendemos que el comercio internacional favorece el crecimiento de los países, evidentemente el cierre del comercio internacional va en perjuicio de los países".
"Si yo fuera presidente de un país me preguntaría cuáles son las opciones que tengo como presidente para orientar a mi país frente a esta guerra comercial. Hay cuatro opciones. La primera sería acercarme a Estados Unidos y alejarme de China. La segunda sería acercarme a China y alejarme de Estados Unidos. La tercera sería no comerciar o no vincularme con ninguno de los dos, y la cuarta, que creo que es la que quieren seguir la mayoría de los países, es buscar una suerte de equilibrio sensible, sutil, entre ambos países" explicó.
A su vez, el experto argentino Jorge Castro, titular del Instituto de Planeamiento Estratégico, consideró, en una entrevista con Xinhua, que la reunión entre Xi y Trump fue un encuentro absolutamente crucial y decisivo, y que el consenso alcanzado "es un acontecimiento de extraordinaria importancia para el sistema mundial".
"Transforma el conflicto entre Estados Unidos y China en un mecanismo de cooperación y de negociación permanente, que por lo tanto reduce drásticamente la incertidumbre en el mundo y marca cuál es la orientación del sistema mundial" por los próximos diez, veinte o treinta años, vaticinó.
