Personas ondean banderas de colores, durante una marcha en contra de la discriminación, en la ciudad de Tijuana, en el noroeste de México, el 18 de noviembre de 2018. De acuerdo con información de la prensa local, la marcha fue convocada el sábado por la organización "Pueblos Sin Fronteras" con el objetivo de demostrar que los ciudadanos no tienen un problema en contra de los migrantes, después de que otro grupo de habitantes se manifestara en contra de la presencia de los integrantes de la caravana migrante. (Xinhua/Joebeth Terriquez)
TIJUANA, México, 18 nov (Xinhua) -- Un grupo de habitantes de la ciudad de Tijuana, en la frontera con Estados Unidos, protestó hoy por la presencia de los migrantes centroamericanos que han llegado en grupos en los últimos días a la localidad.
Alrededor de 300 personas, según el cálculo de policías de Tijuana, se congregaron por la mañana de este domingo en una glorieta de la céntrica avenida Paseo de los Héroes con banderas de México y pancartas para manifestarse en contra del arribo de los migrantes.
Los manifestantes basaron su molestia en que la masiva caravana entró de manera irregular a México, además de que Tijuana enfrenta problemas de inseguridad, que creen podrían empeorar durante su estancia y mientras tramitan entrar a Estados Unidos.
"No voy a pagar mis impuestos para que vengan otras personas entre las que hay delincuentes", dijo Homero, un comerciante originario de la cuidad, en el estado mexicano de Baja California (noroeste).
El pasado miércoles, otro grupo de habitantes protestó y se encaró con varios migrantes en la zona de Playas de Tijuana.
La multitudinaria caravana entró a México por su frontera con Guatemala el pasado 19 de octubre y durante su travesía por el país no había enfrentado manifestaciones en las calles en su contra.
Rafael Franco, un hombre que dijo ser subdirector de una escuela secundaria, acusó en la manifestación que la caravana ingresó al país al agredir a la policía y exigió que las autoridades migratorias tomen registro de sus integrantes.
"Estamos molestos por la forma en que esta gente ha tratado a México", refirió el hombre de 57 años, quien aseguró ser nieto de migrantes guatemaltecos.
Algunos manifestantes usaron en las pancartas que sostenían consignas como "indeseables" e "invasores" para referirse a los migrantes.
Rechazaron, sin embargo, ser racistas o hacer eco del duro discurso que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene hacia la migración.
"Nosotros no somos racistas. Primero México", respondió Homero el comerciante.
Los manifestantes, que dijeron haberse organizado a través de las redes sociales, subieron para protestar a la base de un monumento y desde ahí gritaron sus consignas y cantaron el himno mexicano.
Más de 2.400 integrantes de la caravana que salió de Honduras el 13 de octubre pasado habían llegado hasta el sábado al albergue habilitado en Tijuana.
Otros 1.800 centroamericanos se encontraban en la vecina ciudad de Mexicali, también del estado de Baja California, según las autoridades locales.
Los migrantes, entre los que también hay salvadoreños y guatemaltecos, refieren que salen de sus países por las dificultades económicas y que buscan mejores oportunidades en Estados Unidos, cuyo gobierno ha reforzado la seguridad en su frontera con México ante su arribo.
