BEIJING, 14 jun (Xinhua) -- El satélite de retransmisión para la sonda lunar Chang'e-4, que aterrizará suavemente en el lado oscuro de la Luna al fin de este año, ha entrado en la órbita de misión, anunció hoy jueves la Administración Nacional del Espacio de China.
El satélite, llamado Queqiao, o Puente de la Urraca, fue lanzado el 21 de mayo y entró en la órbita de halo alrededor del segundo punto de Lagrange (L2) del sistema Tierra-Luna a 65.000 kilómetros de la Luna a las 11:06 del jueves (hora de Beijing), tras más de 20 días de viaje.
"El satélite es el primero de comunicación del mundo que opera en esa órbita y allanará el camino para el Chang'e-4, que se convertirá en la primera sonda del mundo en aterrizar de forma controlada y circular por el lado oscuro de la Luna", dijo el presidente de la Academia de Tecnología Espacial de China, Zhang Hongtai.
El concepto de la órbita de halo alrededor del punto L2 del sistema Tierra-Luna fue avanzado por expertos espaciales internacionales en la década de los 50.
Mientras que está en órbita, el satélite de retransmisión puede ver tanto la Tierra como la cara oculta de la Luna. El satélite puede permanecer en la órbita de halo durante mucho tiempo debido al relativo bajo consumo de combustible, ya que la gravedad de la Tierra y la Luna equilibra el movimiento orbital del satélite.
"Desde la Tierra, la órbita se asemeja a un halo de la Luna, circunstancia por la que fue nombrada de esta manera", explicó Zhang Lihua, jefe de proyecto del satélite de retransmisión.
Zhang indicó que la órbita de halo era una curva irregular de tres dimensiones. Es extremadamente difícil y complejo mantener el satélite en órbita.
"Si hay alguna pequeña perturbación, como una gravitacional de otros planetas o del Sol, el satélite dejará la órbita. El periodo de órbita es de cerca de 14 días. Según nuestro plan actual, realizaremos un mantenimiento de órbita cada siete días", apuntó Zhang.
"Queqiao es como un niño corriendo sin freno en órbita. Si nuestro equipo comete incluso la más mínima negligencia, el satélite se perderá para siempre", aseguró Guan Bin, un diseñador del sistema de control satelital.
"Es un nuevo tipo de órbita, no tenemos ninguna experiencia. Hemos realizado numerosas simulaciones para asegurarnos que el diseño es viable y confiable", resaltó Zhang.
Con el objetivo de establecer el enlace de comunicaciones entre la Tierra y la planeada sonda lunar Change'e-4, los astrofísicos deben mantener el satélite estable y controlar su altitud, ángulo y velocidad con alta precisión.
Lo siguiente para el equipo será probar la función de comunicación del satélite de retransmisión.