RIO DE JANEIRO, 22 feb (Xinhua) -- Las Fuerzas Armadas de Brasil buscan restaurar la estructura de la policía de Río de Janeiro durante los 10 meses de intervención militar en ese estado, con la compra de armas y vehículos para atender la queja de los cuerpos policiales.
La información, divulgada hoy por la televisión Globonews, con base en fuentes del Ejército, supone que los militares encargados de vigilar por la seguridad en el estado más turístico de Brasil tendrán también como objetivo un cambio en la estructura de la Policía Civil y de la Policía Militar.
El general Walter Souza Braga Netto, designado el pasado viernes por el presidente brasileño, Michel Temer, para dirigir la cartera de Seguridad Pública de Río, manifestó su intención de restablecer la capacidad operativa de la policía.
El presupuesto que será destinado a la operación todavía no ha sido definido por el gobierno de Temer, pero la expectativa de los militares es que haya recursos para que la intervención sea exitosa.
El ministro brasileño de Hacienda, Henrique Meirelles, admitió el miércoles que el Ejecutivo central plantea conceder un préstamo de unos 1.000 millones de reales (unos 303 millones de dólares) para el estado de Río de Janeiro, en quiebra económica.
Según versiones difundidas esta semana por la prensa local, el plan del Comando Militar del Este (CML) es equipar a sectores de las policías militar y civil, y reestructurar los organismos de seguridad, con un refuerzo en el área de inteligencia.
La última compra de vehículos por parte de la policía militar tuvo lugar en 2014.
En la actualidad, más de la mitad de la flota de vehículos de la policía militar está fuera de circulación, e incluso se vieron imágenes de agentes empujando los vehículos.
Los policías se quejan también de la falta de mantenimiento de las armas. Fin
