NACIONES UNIDAS, 27 oct (Xinhua) -- Los procesos de prevención de conflictos de la ONU necesitan una reforma radical para garantizar que sean proactivos y no únicamente reactivos, además de tomar en cuenta los derechos humanos, indicó hoy un experto en derechos humanos de la ONU.
Los actuales esfuerzos para prevenir conflictos son "reactivos, inefectivos, a menudo incoherentes y tampoco son holísticos o estratégicos para prevenir la violencia o evitar que se repita", dijo a la Asamblea General el relator sobre justicia transicional de la ONU, Pablo de Greiff.
"La prevención no es una forma de respuesta a las crisis. Va mucho más allá de los esfuerzos de alerta temprana", dijo De Greiff. "Existen buenas razones para asegurarnos de que los países al borde de conflictos violentos no caigan en ellos".
La labor de prevención requiere un enfoque más amplio y tiene que ser introducida con mayor anticipación en los procesos, dijo el relato especial.
"Ninguno de los esfuerzos realizados hasta ahora muestra lo que significa la prevención en términos de contenido, de los vínculos entre prevención y derechos humanos", añadió.