Por Edna Alcántara
MEXICO, 25 jul (Xinhua) -- La escasez y deterioro de la calidad del agua y la presencia cada vez más frecuente de eventos climáticos extremos como sequías, inundaciones y huracanes, ponen en riesgo la viabilidad económica, social y ambiental de varias regiones del mundo y en particular de América Latina, advirtió hoy el director de Seguridad Hídrica para América Latina de The Nature Conservancy (TNC), Hugo Contreras.
El éxito en la lucha contra esos desafíos dependerá "de la capacidad que tengamos de salvaguardar las fuentes de agua y mitigar los impactos causados por fenómenos hidrometeorológicos extremos", dijo Contreras en entrevista con Xinhua.
Para el especialista, "es indispensable enfocar las políticas de manera más integral" en todo el mundo, con el fin de "garantizar agua para las personas, agua para los ecosistemas, agua para la industria, agua para el desarrollo económico y que nuestras comunidades sean resilientes ante los efectos del cambio climático".
Durante esta semana se llevan a cabo en diferentes países reuniones regionales del Panel de Alto Nivel Sobre Agua (HLPW, por sus siglas en inglés), impulsado en 2016 por los líderes de la ONU y el Banco Mundial (BM), y su finalidad es estimar el valor del agua, más allá del dinero, siendo un tema que permea todos los aspectos de la actividad humana, la agricultura, la creación de energía y la industria, entre muchos otros.
Contreras participó en el encuentro de México, celebrado este lunes y martes, en el que se reconoció "el valor del agua como un bien escaso relativo y que está en riesgo porque no estamos cuidando las fuentes y, que además, está en riesgo porque no le estamos asignando los recursos necesarios".
En ese sentido, mencionó que si bien México trabaja sobre el tema e incluso ha propuesto que el agua se incluya como parte de la seguridad nacional, aún carece de un trabajo legislativo que "nos permita avanzar y tener las reglas del juego que aún no son adecuadas para enfrentar los grandes riesgos que estamos enfrentando", como son garantizar agua suficiente en calidad y cantidad para los diversos usos.
Además de ello, abundó, se requiere atender a futuro la mayor demanda de este recurso natural ante el crecimiento demográfico y enfrentar problemas que trae el cambio climático.
"México se encuentra en una situación hídrica muy complicada, ya que es vulnerable a los desastres naturales. Además de que la mitad de su territorio es desierto y el 80 por ciento (de la población) que genera el Producto Interno Bruto vive en donde solamente existe el 20 por ciento del agua", indicó.
Es decir, "estamos poniendo en riesgo nuestro futuro y debemos empezar a pensar cuáles son las alternativas para dotar a las personas, a las ciudades, de agua, y no solo basta con pensar en construir acueductos", enfatizó.
De acuerdo con la ONU, las inundaciones y las sequías imponen ya enormes costos sociales y económicos en el mundo, y la variabilidad del clima hará más frecuentes estos fenómenos extremos relacionados con el agua.
Además, si las tendencias se mantienen, las proyecciones apuntan a que el mundo enfrentará 40 por ciento de escasez de agua para el año 2030, lo que tendrá impactos locales, transfronterizos y globales.
Actualmente, explicó Contreras, México tiene niveles de extracción superiores a los niveles de disponibilidad de agua.
"También es cierto que no tenemos capacidad de almacenamiento (...) creo que la ciencia dice que las cosas se van a poner difíciles, pues las cosas se van a complicar y se verá la competitividad social por esta tensión por diferentes usos de agua", agregó el también economista del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
El especialista añadió que el caso de China es interesante ya que, dijo, tiene un papel importante que jugar en términos de tecnología y sus avances "han sido importantes para implementar proyectos exitosos en el manejo de los recursos hídricos y el control de la contaminación en algunas zonas".
"Yo creo que el caso de China es paradigmático porque hoy en día destina recursos muy importantes y creo que ese es un mensaje a nuestro país en el que se tiene mucha potencialidad y muchas oportunidades para invertir inteligentemente en mejorar nuestra gestión del agua", sostuvo Contreras.
FONDOS DE AGUA CONTRIBUYEN A FORTALECER EL MANEJO INTEGRADO DE CUENCAS EN AMERICA LATINA
A fin de garantizar la seguridad hídrica en algunos países de América Latina, se cuenta con los Fondos de Agua, con los que contribuyen a fortalecer el manejo integrado de las cuencas y la gobernanza de los recursos hídricos.
El proyecto se introdujo por primera vez en Ecuador, basado en las mejores herramientas de planificación y en el conocimiento científico para contribuir a la seguridad hídrica en beneficio de las personas y la naturaleza.
Debido a su éxito, Contreras precisó que se ha extendido esa iniciativa con el apoyo de la Fundación Femsa, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FNAM), y actualmente trabaja en 22 ciudades de siete países.
A partir de ello, detalló que se creó la Alianza Latinoamericana de Fondos de Agua, el cual "se está expandiendo e incluso se ha replicado en países como Estados Unidos, en otros en Africa y Asia", indicó Contreras al adelantar que próximamente se implementará en Chile y Argentina.
La Alianza, comentó, cuenta con un portafolio de 19 Fondos, más de 200 socios locales, con inversiones de alrededor de 100 millones de dólares, al menos 200.000 hectáreas directamente intervenidas y tiene un impacto positivo en aproximadamente 3,3 millones de hectáreas.
"Somos optimistas de que el proyecto se irá expandiendo y seguirá dando resultados positivos, y que miles de familias sean directamente beneficiadas con recursos y apoyos técnicos para ejecutar actividades de campo", puntualizó.
La Alianza y los Fondos de Agua contribuyen también a que las ciudades se adapten y mitiguen los efectos del cambio climático.
El Panel de Alto Nivel del Agua fue establecido en 2016 por el secretario general de las Naciones Unidas y el presidente del Banco Mundial. Cuenta con 11 miembros (Australia, Bangladesh, Hungría, Jordania, Mauricio, México, Holanda, Perú, Senegal, Sudáfrica y Tayikistán) a nivel de jefe de Estado y de Gobierno y un asesor especial del secretario general de la ONU, bajo la copresidencia de México.
Dicho Panel tiene como objetivo elevar el perfil político del tema del agua en diversos foros y procesos internacionales, y plantear que sea atendido con una perspectiva integral de desarrollo sostenible.
Cifras oficiales muestran que el acceso a saneamiento y agua segura todavía está fuera del alcance de 2.500 millones de personas y otros 768 millones, respectivamente, y se traduce en la pérdida de miles de vidas diarias y miles de millones de dólares cada año.
