De acuerdo con un documento blanco emitido el mes pasado por la Oficina de Información del Consejo de Estado, para fines de 2016, menos del 10 por ciento de la población de Xinjiang vivía en la pobreza.
Yu también pidió una mayor calidad en la educación para fomentar más talentos y destacó la importancia de facilitar la comunicación entre los diferentes grupos étnicos para promover la unidad étnica.
El gobierno chino ha estado implementando un programa de "asistencia de emparejamiento" que permite a otras regiones del país suministrar apoyo financiero y de personal a Xinjiang.