FLORIDA, abril 7, 2017 (Xinhua) -- El presidente de China, Xi Jinping (d), se reúne con su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, en su residencia de Mar-a-Lago en Florida, Estados Unidos, el 6 de abril de 2017. (Xinhua/Lan Hongguang)
MAR-A-LAGO, Estados Unidos, 6 abr (Xinhua) -- El presidente de China, Xi Jinping, dijo el jueves que está listo para trabajar con su homólogo estadounidense, Donald Trump, en el impulso de las relaciones entre los dos países desde un nuevo punto de partida.
Cuando se reunió con Trump en la residencia del presidente estadounidense Mar-a-Lago, en el estado de Florida, Xi dijo que "existen mil razones para activar los lazos entre China y Estados Unidos, y ninguna razón para romperlos".
Desde que China y Estados Unidos normalizaron sus relaciones hace 45 años, los lazos bilaterales, pese a experimentar altibajos, han logrado avances históricos y han generado beneficios enormes y pragmáticos a los dos pueblos, agregó Xi.
El presidente chino señaló que se necesita voluntad política y compromisos históricos de los líderes de ambos países para ampliar las relaciones bilaterales en los próximos 45 años.
Xi también invitó a Trump a realizar una visita de Estado a China este año.
El mandatario chino señaló que ha mantenido frecuentes contactos con Trump por teléfono y cartas por algún tiempo, y está contento de reunirse aquí con Trump como su huésped.
Una relación bilateral sólida beneficiará no sólo a los dos países y pueblos, sino también al mundo entero, subrayó.
Xi añadió que la cooperación es la única opción correcta para China y Estados Unidos, y señaló que los dos países son capaces de convertirse en grandes socios de cooperación.
El presidente chino también subrayó el papel de los mecanismos de diálogo y cooperación de alto nivel recién establecidos entre China y Estados Unidos en áreas como diplomacia y seguridad, economía, aplicación de la ley y ciberseguridad, así como los intercambios sociales y entre personas.
Xi exhortó a los dos países a establecer una lista de prioridades de cooperación para obtener resultados tempranos, avanzar en las negociaciones sobre el tratado de inversión bilateral y explorar la cooperación pragmática en la construcción de infraestructura y energía, entre otras áreas.
También señaló que las dos partes deben manejar apropiadamente asuntos sensibles, atender y controlar diferencias de manera constructiva, y fortalecer la comunicación y la coordinación de importantes asuntos internacionales y regionales.
China y Estados Unidos deben expandir su cooperación para enfrentar desafíos globales, tales como la no proliferación y la lucha contra los delitos transfronterizos, mencionó Xi.
El presidente chino pidió a los dos países reforzar la comunicación y la coordinación en mecanismos multilaterales como la Organización de las Naciones Unidas, el Grupo de los 20 y el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), para salvaguardar en conjunto la paz, la estabilidad y la prosperidad del mundo.
Por su parte, Trump aceptó con gusto la invitación para una visita de Estado a China y dijo que espera realizar ese viaje en una fecha próxima.
Estados Unidos y China tienen fuertes responsabilidades como importantes países en el mundo, mencionó Trump, quien expresó que tiene muchas expectativas sobre la reunión y que espera establecer sólidas relaciones de trabajo con Xi para un mayor desarrollo de las relaciones bilaterales.
Los dos jefes de Estado se informaron mutuamente sobre las actuales prioridades de la agenda interna y diplomática, e intercambiaron opiniones sobre asuntos regionales de importancia.
A su llegada a Mar-a-Lago, Xi y su esposa, Peng Liyuan, fueron recibidos por el presidente Trump y por la primera dama Melania.
Antes de la conversación profunda, amistosa y extensa entre Xi y Trump, las dos parejas disfrutaron del canto de una balada tradicional china y de la declamación de antiguos poemas chinos por parte de los nietos de Trump.
Xi llegó temprano a Palm Beach, en la costa sudeste de Estados Unidos, para su primera reunión con Trump, destinada a marcar el curso de las relaciones bilaterales en una nueva era.