BEIJING, 31 mar (Xinhua) -- China espera que la próxima reunión entre el presidente de China, Xi Jinping, y su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, establezca la dirección para el desarrollo de las relaciones bilaterales, afirmó hoy viernes el viceministro de Relaciones Exteriores Zheng Zeguang.
"Será la primera reunión entre los jefes de Estado de China y Estados Unidos desde que la nueva administración estadounidense tomó posesión", recordó Zheng en una conferencia de prensa.
Los días 6 y 7 de abril, Xi se reunirá con Trump en la localidad estadounidense de Mar-a-Lago, en Florida.
"Dado que la situación internacional continúa experimentando cambios complicados y profundos, la reunión será de gran importancia para trazar las relaciones sino-estadounidenses en una nueva era, avanzar en el desarrollo de las relaciones bilaterales en un modo sano y estable desde un nuevo punto de partida y promover la paz, la estabilidad y la prosperidad en Asia y el Pacífico, así como en el mundo en su conjunto", dijo el funcionario.
Según Zheng, Xi sostendrá conversaciones con Trump, durante las que intercambiarán puntos de vista en profundidad sobre las relaciones sino-estadounidenses y los principales asuntos regionales e internacionales de interés común con una visión de mejorar el entendimiento mutuo y ampliar la cooperación bilateral.
El presidente Xi y su esposa, Peng Liyuan, asistirán a un banquete de bienvenida ofrecido por Trump y su esposa, Melania Trump, de acuerdo con Zheng.
El viceministro aseguró que los presidentes chino y estadounidense han alcanzado consensos importantes a través de las conversaciones telefónicas y cartas intercambiadas en los meses pasados.
"Ambos creen que China y Estados Unidos pueden ser buenos socios sin duda", dijo Zheng, que añadió que los dos países deben defender el principio de no conflicto, no confrontación, respeto recíproco y cooperación de beneficio mutuo al avanzar en sus relaciones.
Zheng indicó que la parte china trabajará estrechamente con la estadounidense en los preparativos de la reunión de los presidentes, a fin de lograr que sea un completo éxito.
En relación al déficit comercial de Estados Unidos con China, el viceministro afirmó que es resultado de la distribución de las industrias y la división del trabajo en el mundo, así como de las diferentes estructuras económicas de los dos países.
"En el comercio entre China y Estados Unidos, a pesar de que tenemos un superávit en mercancías, estamos en el lado del déficit en lo que respecta a los servicios", manifestó Zheng.
Entre 2001 y 2016, las exportaciones de servicios de Estados Unidos a China y el superávit estadounidense en este rubro se multiplicaron por 15 y 29, respectivamente, según las estadísticas del Ministerio de Comercio del país asiático.
"China no busca un superávit comercial y no es nuestra intención estimular las exportaciones a través de una devaluación competitiva de la moneda", aseguró.
Además, expresó su esperanza de que Estados Unidos pueda relajar sus controles sobre las exportaciones de alta tecnología, crear igualdad de condiciones y proporcionar una facilitación política para las empresas chinas que invierten en el país americano, lo cual podría ayudar a hacer frente al déficit comercial.
Dado que son la primera y la segunda economías mundiales, los dos países tiene un gran potencial para expandir la cooperación económica y comercial y podrían gestionar de forma adecuada las fricciones comerciales en línea con el principio de los beneficios recíprocos y la búsqueda de un resultado de beneficio mutuo, añadió Zheng.