MEXICO, 11 ene (Xinhua) -- Para México, a partir de la llegada al poder del republicano Donald Trump de Estados Unidos, inicia una nueva etapa en esa relación bilateral pese a tener, junto con Canadá, un acuerdo comercial de 23 años y que debido a su cercanía se distingue por los estrechos lazos entre los dos pueblos.
Ello, luego de que Trump, y a nueve días de tomar posesión como presidente de Estados Unidos, dejó una vez más en claro este miércoles en su primera conferencia a medios el de mantener en pie sus intenciones con México, particularmente la de construir un muro que separará a las dos naciones, quienes además, y de acuerdo al político estadounidense, deben renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, es el primero en reconocer que todo indica el inicio de "una nueva etapa" entre los países vecinos, por lo que aseguró este miércoles que una vez que inicie la administración del republicano Trump, el 20 de enero, se habrán de establecer diversas negociaciones de manera abierta y completa, en todos los temas incluyendo la seguridad, el comercio y la migración.
No obstante, y algo en lo que sí lo apoyan los mexicanos, diversos sectores e incluso partidos políticos, es que que dentro de esta relación "no se aceptara nada que vaya en contra de nuestra dignidad como país y de los mexicanos".
Trump ofreció esta mañana su primera conferencia para la prensa donde anunció su separación temporal de su imperio comercial, así como también dejar en claro que mantendrá su retórica proteccionista al igual que sus planes de construir un muro, mismo que sostiene pagará México de alguna manera.
"No son negociables los principios básicos como soberanía, el interés nacional y la protección de connacionales, aunque hay evidentes diferencias con el nuevo gobierno de Estados Unidos. En el tema del muro por supuesto que México no lo pagará", aseveró Peña Nieto en respuesta a las declaraciones de Trump.
Durante su campaña electoral, Trump ya había amenazado con la construcción de este muro a fin de evitar el paso de inmigrantes de centro, sudamérica y principalmente de mexicanos a quienes incluso comparó con delincuentes y narcotraficantes, además de que amenazó que deportaría a uno 3 millones de indocumentados.
Desde entonces, ello ha provocado la indignación de la sociedad y muchos sectores de México, al grado de calificarlo como una persona non grata luego de que visitara el país latinoamericano el año pasado como candidato a la presidencia.
Este día, Trump se dirigió hacia los mexicanos de otra manera, les expresó su respeto, reconoció al Gobierno, a sus autoridades y muchos migrantes que trabajan de manera legal en su país, aunque insistió en que éste país se ha aprovechado de Estados Unidos.
En ese sentido, para la académica Raquel Saed, el discurso de Trump deja mucho que desear pues "pareciera que aún está en campaña y ya no debiera ser así. Eso preocupa".
La erudita del departamento de estudios internacionales de la privada Universidad Iberoamericana, y en una entrevista a Xinhua, reconoció que si bien el político estadounidense republicano tiende a calificar "a las personas y a las cosas" como lo hizo este miércoles con los mexicanos a quienes ahora ve como buenas personas, al final "ello demuestra que México está jugando un papel interesante".
Saed, quien hizo una reflexión de cada tema que abordó Trump en su conferencia, también reconoció que aunque las intenciones del republicano son el de cambiar las reglas del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, integrado por México, EEUU y Canadá) por considerarlo ventajoso para el país mexicano y no para los norteamericanos, "eso no lo podrá hacer porque es un tratado que tiene que respetar pues está vigente y así será en tanto no se derogue.
De igual manera, aseguró que el político estadounidense en realidad no tiene el poder ni facultad para controlar a las empresas para que dejen de invertir en otros países como México.
"Lo que logró Trump fue que empresas como Ford, cancelaran la construcción de una planta en México pero no que cancelara sus operaciones en México. Es un discurso político en el que Trump quiere como llamar la atención y diciendo - miren me hicieron caso. Todo eso es tan absurdo, el querer demostrar que es un gran político", criticó Saed.
Trump hasta la fecha y antes de asumir el poder de la Casa Blanca, ha ejercido también presiones contra empresas como las automotrices que operan en México, a fin de que se mantengan sus inversiones en Estados Unidos.
Este día y pese a las amenazas hechas por Twitter, como fue el caso de Toyota, a quien le dijo que cobraría impuestos superiores si continuaba sus planes de producir autos Corolla en México, agradeció a firmas como Ford en que anunciaran la apertura de una planta en el país norteamericano tras la suspensión de una millonaria inversión en México.
La semana pasada la compañía estadounidense Ford anunció la cancelación de una inversión de 1.600 millones de dólares en una planta de producción en el central estado mexicano de San Luis Potosí, luego de que Trump advirtiera en cobrarle mayores aranceles a la empresa General Motors si trasladaba la producción del modelo Chevy Cruze a México.
"Creo que está moderando el lenguaje y quizá hay algunos resultados pero al final no puede controlar las decisiones de las empresas", añadió la especialista.
En coincidencia el también catedrático de la Universidad Iberoamericana, José Martín Ramos, México debiera aprovechar el interés de Trump para renegociar el TLCAN, principalmente para definir las reglas en el sector del autotransporte y aranceles.
"México debe fijar su posición y tiene que ser muy seria ... México tiene que ser cuidadoso y negociar con base a lo que lo que le conviene y no conviene", acotó.
En tanto, intelectuales, legisladores, diplomáticos y ciudadanos mexicanos, se sintieron una vez más indignados por las declaraciones de Trump realizadas en ésta, su primera rueda de prensa en la que además adelantó que en las siguiente semanas se darían a conocer muchas noticias sobre inversiones en Estados Unidos en lugar de otros países y en donde amenazó con aranceles para aquellas empresas que deseen mover su producción a México.
Para ambos catedráticos, luego de que Trump se dedicó a señalar negativamente a los medios de comunicación, criticar los servicios de inteligencia y explicar el manejo que tendrán sus bienes una vez que sea Presidente, al final lo que ha logrado es ser cuestionado por ello.
