La economía de China, que se ha integrado profundamente en el mundo, se está desacelerando, pero sigue manteniendo un crecimiento estable, a una tasa anual de 6,7 por ciento en el primer semestre de este año, lo cual no es fácil para una economía que ha llegado a los 10 billones de dólares, señaló.
Con una tasa de crecimiento anual de entre 6 y 7 por ciento, la economía de China cada año puede añadir un volumen equivalente a una economía mediana, indicó Li.
La economía china aún necesita crecer a tasas medias-altas, debido a que cada año se incorporan al mercado laboral 14 millones más de personas en áreas urbanas. China también necesita librar una guerra contra la pobreza, que todavía agobia a alrededor de 50 millones de chinos, comentó el primer ministro.
China es capaz de mantener este crecimiento medio-alto gracias a los actuales esfuerzos para reestructurar y mejorar su economía y al surgimiento de nuevos motores y dinámicas de crecimiento, aseguró Li a la audiencia.
Los grandes logros que China ha alcanzado en las últimas tres décadas son atribuibles a la reforma y la apertura, que aún es crucial para la actual reestructuración y modernización económicas, señaló el primer ministro.
