Xi llegó al país asiático central el martes para hacer una visita de Estado, la segunda en tres años. Además, asistirá a la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS).
Durante las conversaciones, los dos líderes acordaron elevar los vínculos bilaterales a una asociación estratégica integral con el fin de cimentar la amistad tradicional y profundizar la cooperación de beneficio mutuo.
También decidieron continuar fortaleciendo el apoyo mutuo en asuntos relacionados con sus intereses clave, tales como territorio, soberanía y seguridad, apoyarse mutuamente en la vía de desarrollo que ha elegido cada uno y elevar la comunicación y coordinación sobre importantes asuntos internacionales y regionales.
Con respecto a la seguridad, las dos partes prometieron enfrentar con firmeza las "tres fuerzas malignas" del terrorismo, separatismo y extremismo, y cooperar activamente en seguridad cibernética, control de drogas y combate del crimen organizado transfronterizo.
Los dos jefes de Estado también acordaron llevar a cabo intercambios culturales y entre pueblos.
"China está dispuesta a trabajar de cerca con Uzbekistán para impulsar el desarrollo de nuestras relaciones bilaterales y alcanzar más resultados prácticos", dijo Xi.
Por su parte, Karimov describió a Uzbekisán y China como "buenos vecinos y socios" e indicó que la visita de Xi promoverá contundentemente la amistad tradicional y la cooperación recíproca.
Uzbekistán apoya la gran causa china de reunificación y los principios y posiciones de China sobre asuntos como Taiwan y el Tíbet.
Los dos líderes también intercambiaron opiniones sobre el desarrollo de la OCS.
Después de las conversaciones cumbre se emitió una declaración conjunta y se firmó una serie de acuerdos de cooperación entre las dos partes, que abarcan diplomacia, economía y comercio, derechos de propiedad intelectual y financiamiento.
Uzbekistán es la tercera y última escala de la gira de Xi por tres naciones, la cual también incluyó a Serbia y Polonia.