BEIJING, 30 abr (Xinhua) -- El ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, planteó un requisito de cuatro puntos sobre la mejora de los vínculos sino-japoneses durante su conversación con su homólogo nipón, Fumio Kishida, hoy sábado en Beijing.
En primer lugar, en cuando a la política, el lado japonés debe adherirse a los cuatro documentos políticos entre los dos países, afrontar y reflexionar sobre la historia y seguir al pie de la letra la política de una sola China, señaló Wang.
No se permite ninguna ambigüedad ni vacilación en materia de esta importante base política de los lazos bilaterales, enfatizó.
En segundo lugar, en términos de su actitud respecto a China, Japón debe traducir a acciones concretas los consensos alcanzados con China de que ambos países son socios cooperativos en lugar de una amenaza el uno para el otro, de acuerdo con el canciller chino.
Japón debe adoptar una actitud más positiva y sana hacia el crecimiento de China y dejar de difundir o hacerse eco de las teorías sobre "la amenaza de China" o "la recesión económica de China", agregó Wang.
En tercer lugar, en cuanto al intercambio económico, la parte nipona debe establecer el concepto de una cooperación de beneficio mutuo, descartar la idea anticuada de que una parte no puede prescindir de la otra o que una parte depende más de la otra que al revés.
En cambio, Japón debe fortalecer una cooperación con China que sea de igualdad, pragmática y basada en el beneficio mutuo, manifestó Wang.
Por último, en cuanto a los asuntos regionales e internacionales, ambas partes deben respetar los legítimos intereses y preocupaciones respectivos, así como comunicarse y coordinarse de manera oportuna, indicó el ministro.
Japón debe rechazar la mentalidad de confrontación y trabajar con China para mantener la paz, la estabilidad y la prosperidad de la región, agregó Wang.
Kishida está realizando una visita oficial a China del viernes al domingo, la cual es la primera que lleva a cabo desde que tomó posesión del cargo hace más de tres años y la primera de un canciller nipón en cuatro años y medio.
Aún existe una falta de confianza entre ambos lados a pesar de las señales de mejora en las relaciones sino-japonesas, señaló Wang durante las conversaciones, en las que enfatizó que la causa de raíz de las vueltas y giros en los vínculos bilaterales es la actitud nipona hacia la historia y hacia China.
La visita de Kishida tiene un significado positivo, afirmó Wang, que exhortó al lado japonés a demostrar sinceridad, respaldar sus palabras con hechos y volver a poner las relaciones bilaterales en el camino del desarrollo sano con acciones concretas.
El próximo año se cumple el 45º aniversario de la normalización de los lazos diplomáticos entre China y Japón, y el año posterior, el 40º aniversario de la firma del Tratado de Paz y Amistad China-Japón. Wang apuntó que estas son oportunidades importantes para la mejora de las relaciones sino-niponas.
Kishida, por su parte, subrayó que el desarrollo de China supone oportunidades para Japón y señaló que el lado nipón elogia a China por su papel positivo y sus contribuciones en muchos asuntos internacionales y regionales.
Japón y China, tercera y segunda mayores economías del mundo, asumen importantes responsabilidades en el desarrollo y la prosperidad de Asia y el mundo, dijo Kishida.
A la parte japonesa le gustaría reafirmar que China y Japón son socios, en lugar de una amenaza el uno para el otro, dijo el canciller nipón, que indicó que Japón está dispuesto a seguir los cuatro documentos políticos y el acuerdo de cuatro puntos alcanzado entre ambos países.
Sobre la base de la reflexión sobre la historia y la búsqueda de un desarrollo pacífico, Japón está preparado para unirse a la parte china en la construcción de una comprensión y una confianza mutuas y la expansión de los intercambios y la cooperación de forma generalizada, indicó Kishida.
Además, manifestó la disposición a trabajar con China para gestionar adecuadamente las diferencias y crisis y ampliar la dimensión positiva de las relaciones bilaterales con el fin de construir una relación Japón-China en la nueva era.
Kishida también agradeció a China por su solidaridad y la asistencia a la prefectura de Kumamoto después de que esta se viese afectada por una serie de terremotos a mediados de abril.
El primer ministro chino, Li Keqiang, y el consejero de Estado Yang Jiechi también se reunieron con el titular de la cancillería japonesa hoy sábado.