En otro discurso pronunciado en la sede de la City de Londres, el presidente resaltó el desarrollo de las relaciones amistosas entre China y Reino Unido y citó una larga lista de personajes británicos, desde William Shakespeare hasta James Bond y David Beckham.
Xi profundizó específicamente en la influencia que Shakespeare tuvo sobre su persona al ofrecer un raro atisbo de su dura juventud como campesino en una zona rural pobre del noroeste de China, cuando fue cautivado por las obras de Shakespeare.
"En el árido loes de Shaanxi cuando era joven, a menudo meditaba sobre la pregunta de 'ser o no ser'", dijo el presidente a la audiencia británica al citar al maestro.
"Finalmente, decidí que debía dedicarme a servir a mi país y a mi pueblo", dijo Xi, el timonel del país más populoso del mundo y de la segunda mayor economía.
Al mirar hacia atrás, China y Reino Unido han pasado por altas y bajas en los últimos dos siglos, como lo muestran las dos Guerras del Opio, la devolución de Hong Kong, la cuestión de los derechos humanos y la controvertida reunión de Cameron con el Dalai Lama en 2012.